23 marzo, 2023Este mes, tanto el Consejo de Administración de la OIT como el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) emitieron firmes declaraciones sobre la situación de los derechos humanos en Bielorrusia e instaron al Gobierno a que deje de perseguir a aquellos que participan en sindicatos independientes en el país.
En una reunión celebrada en Ginebra, el Consejo de Administración de la OIT volvió a pedir al Gobierno de Bielorrusia que respete la libertad sindical y legalice los sindicatos independientes y las organizaciones de empleadores.
El Consejo de Administración instó a que todos los dirigentes y miembros sindicales encarcelados por participar en reuniones pacíficas o realizar actividades sindicales fueran puestos en libertad, y que se retiraran todos los cargos relacionados en su contra.
Además, el Consejo de Administración ha incluido a Bielorrusia en el orden del día de la próxima reunión de la Conferencia Internacional del Trabajo, que se celebrará en junio.
El 17 de marzo, la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas publicó un informe que documenta violaciones generalizadas y sistemáticas de las leyes internacionales sobre derechos humanos en Bielorrusia.
En el informe, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) exige al Gobierno bielorruso que “ponga fin a la represión sistemática contra las personas presuntamente críticas al país y a que libere de inmediato a todas las personas detenidas por motivos políticos”, y concluye que “se están cometiendo graves violaciones de los derechos humanos en todo el país”.
Los defensores de los derechos humanos, los periodistas y los activistas sindicales han sido claramente blanco de lo que el informe denomina una campaña de violencia y represión contra aquellos que expresan su oposición.
“El informe del ACNUDH plantea que las autoridades bielorrusas no podrán simplemente dar vuelta la página. Asimismo, brinda un mensaje de esperanza de que se castigará a todos los responsables de torturas, del uso de la violencia, incluidos los atentados ilegales contra la vida y los numerosos casos de detención arbitraria, malos tratos, violencia sexual y de género, violaciones de los derechos a la libertad de expresión, a la reunión pacífica y asociación, denegación del debido proceso y del derecho de igualdad ante la ley”,
señaló Maxim Pozniakov, presidente del BNP, afiliado a IndustriALL.
La campaña de las autoridades para reprimir a los sindicatos independientes en el país es implacable. En marzo se registraron más casos de activistas arrestados por cargos falsos.
“La comunidad internacional pone el foco en las violaciones cometidas en Bielorrusia. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras se castiga sin piedad a nuestros compañeros y compañeras por ejercer sus derechos fundamentales”,
afirmó Atle Høie, secretario general de IndustriALL.