11 octubre, 2022Los trabajadores de todo el mundo se enfrentan a una crisis del costo de vida, con aumentos salariales que no compensan la creciente inflación y la subida de los costos de la energía, combinados con ataques a los sindicatos y los derechos laborales. Frente a esta creciente crisis de desigualdad, los sindicatos de varios países, desde Filipinas y Bangladesh hasta Tanzania y Perú, se movilizaron el 7 de octubre, Día Mundial por el Trabajo Decente, para exigir un futuro mejor.
En Georgia, los sindicatos organizaron una exposición fotográfica en las calles para crear conciencia sobre los salarios decentes y la desigualdad.
El Consejo de Japón de IndustriALL Global Union (JLC) celebró un seminario sobre la situación actual, en la que los salarios no han aumentado durante 30 años, y debatieron sobre soluciones para eliminar la distribución injusta. El seminario se llevó a cabo mientras los preparativos para las negociaciones salariales del próximo año están a punto de comenzar.
El presidente del JLC, Takakura, hizo referencia a la crisis del costo de vida existente a medida que aumentan las ganancias de las empresas:
“Es la opinión unánime no solo de los sindicatos, sino de la sociedad en general, que los aumentos salariales son una solución efectiva para combatir los precios elevados y eliminar la desigualdad. Este año, tenemos la oportunidad de abordar este tema mientras nos preparamos para la Lucha de la primavera. Ahora centraremos nuestra atención en los salarios. Si los trabajadores no recibimos salarios más altos para poder comprar cosas, la economía no cambiará”.
En Irak, los sindicatos llevaron a cabo acciones para informar a los trabajadores sobre el Día por el Trabajo Decente y la inestabilidad de los contratos y los salarios. Alaa Odeh Hussein, presidente del Sindicato General de Empleados del Sector Eléctrico de Irak, declaró:
“El tejido de nuestras sociedades se está desgarrando, y las personas, las sociedades y los trabajadores de todo el mundo se están enfrentando a niveles históricos de desigualdad, además de un desempleo masivo, empleos deficientes y contratos precarios en las crecientes economías informales. A medida que tratamos de salir de la crisis sanitaria provocada por la pandemia de la COVID-19, quedamos atrapados en las garras de las crisis del costo de vida, la energía, la seguridad alimentaria y el clima”.
El secretario general de IndustriALL, Atle Høie, afirmó:
“A pesar de las advertencias de las instituciones internacionales y de muchos Gobiernos, la desigualdad está aumentando en todas partes. Mientras que los Gobiernos y los políticos no logran resolver la crisis, los sindicatos están redoblando sus esfuerzos, como hemos visto en las acciones emprendidas en torno al Día Mundial por el Trabajo Decente. Me enorgullece que nuestros afiliados se estén uniendo a nuestro reclamo de que ya es suficiente y es hora de saldar la deuda”.