24 noviembre, 2015Cuando las autoridades laborales oficiales apoyaron a los trabajadores de Shell Pakistan para realizar una votación respecto al establecimiento de un sindicato, la administración local de la empresa respondió con brutalidad, desplegando fuerzas de seguridad, subcontratando mano de obra, y aplicando, como represalia, cambios de turno inaceptables.
IndustriALL Global Union informó en agosto sobre el éxito de la lucha de su afiliado PCEM, (Federación Sindical de Trabajadores de la Química, Energía, Minas e Industrias Diversas de Pakistán), en la Shell en Pakistán. Este sindicato apoyó la solicitud legal que presentaran los 300 trabajadores de Shell para pasar de la precariedad a contratos permanentes y directos.
En 2013, los trabajadores de la planta mezcladora de gasóleos de Shell Pakistan en Keamari, Karachi, solicitaron por primera vez registro oficial del Sindicato de Trabajadores de Insaf Shell Pakistan. La empresa interpuso una apelación, solicitando borrar el registro del sindicato, aduciendo que los 300 trabajadores subcontratados no eran oficialmente empleados de Shell.
Luego, el 16 de julio de 2015, el registrador sindical de Pakistán desestimó la apelación de la administración de la compañía.
Sin embargo, en vez de reconocer el nuevo sindicato y realizar negociaciones para establecer un nuevo convenio colectivo, la administración de Shell Pakistan presentó otra apelación ante la oficina de registro sindical nacional en Islamabad para impedir que en el lugar de trabajo se realizara una votación sobre el sindicato. El 30 de octubre, esta segunda apelación también fue desestimada.
Refiriéndose a esta situación, Imran Ali, Presidente de la PCEM, quien también es Presidente del Consejo Nacional de IndustriALL en Pakistán, informó lo siguiente:
“En lugar de permitir que los trabajadores votaran en favor o en contra de la fundación de un sindicato, el 17 de noviembre, Shell Pakistan desplegó paramilitares en la planta. Luego, la empresa designó a 100 trabajadores recién enganchados a través de contratistas, castigando a sus trabajadores al externalizar el trabajo de envasado de aceite lubricante”.
Por su parte, Kemal Özkan, Secretario General Adjunto de IndustriALL Global Union, reflexiona sobre este tópico, diciendo:
¿Cómo es posible que esta enorme empresa multinacional se atreva a tratar a sus trabajadores en Pakistán con tanto desprecio? Lo que los empleados de Shell en Karachi quieren es que se cumplan sus derechos legales, con los contratos de trabajo correspondientes y representación sindical en su lugar de trabajo. No creo que esto merezca la brutal reacción por parte de la administración, movilizando fuerzas de seguridad. IndustriALL apoya firmemente a su afiliado PCEM.