17 octubre, 2019Los afiliados de IndustriALL Global Union realizaron un segundo día de acciones en contra de los planes del gobierno francés de reestructurar y privatizar parcialmente la gigante energética Electricité de France (EDF).
Luego de una huelga nacional realizada el 19 de septiembre, los sindicatos FNME-CGT, FCE-CFDT, CFE-CGC Energie y FO Energie et Mines, afiliados a IndustriALL, participaron de diversas demostraciones y cierres en las plantas de EDF en todo el país.
Los sindicatos se oponen al plan estatal de dividir a EDF en dos partes, una de las cuales se abrirá a la inversión privada bajo el denominado proyecto “Hercule”. La energía nuclear, las represas y la transmisión seguirán siendo parte del sector público como la EDF “azul”, mientras que la EDF “verde”, que comprende la distribución, las energías renovables y el comercio, pasará a cotizar en bolsa.
La empresa decidió posponer el proyecto Hercule hasta 2020 por motivos técnicos y económicos relativos a un requisito legal sobre la venta de la electricidad a un precio fijo. Es probable que esta disposición afecte el precio del sector público, por lo que el gobierno francés está trabajando con la Comisión Europea para cambiar esta normativa.
Sin embargo, los sindicatos exigen que se abandone completamente el proyecto. Además, pidieron una reunión con el presidente Emmanuel Macron y afirmaron que, de no obtener una respuesta satisfactoria, intensificarán las acciones del 17 de octubre hasta llegar a una huelga nacional.
IndustriALL Global Union tiene un acuerdo marco global con la EDF para promover los derechos humanos y laborales. Este acuerdo es monitoreado por ambas partes para implementar las gestiones necesarias tanto a nivel local como mundial, con el fin de garantizar que se respeten los compromisos establecidos. Los miembros del comité directivo se reunieron en París el 16 de octubre y firmaron una petición para que se cancele el proyecto.
La directora del sector de energía de IndustriALL, Diana Junquera Curiel, expresó:
“Privatizar la generación de energía renovable en el medio de una emergencia climática es profundamente irresponsable del gobierno francés. Apoyamos a nuestros afiliados en su exigencia de que se cancele el proyecto Hercule”.