21 enero, 2019La mayor ironía de que una camiseta para promover la justicia de género la hagan mujeres con salarios de miseria refleja la permanente desconexión entre los defensores en Occidente y las realidades de las cadenas de suministro mundiales.
Un informe publicado en The Guardian ha revelado que una camiseta benéfica para promover la igualdad de las mujeres la confeccionan mujeres bangladeshíes que ganan mucho menos del salario mínimo vital. Se vendió por 19,40 £ para la campaña "justicia de género" de Comic Relief, cuando las mujeres que la han confeccionado ganan sólo 35 peniques (40 céntimos de euro) por hora. Parte de la fábrica pertenece a un ministro del Gobierno.
Esto sucede tras varios escándalos de abastecimiento, incluido un caso en 2015, cuando se reveló que una camiseta de campaña con el lema Así es una feminista fue confeccionada por mujeres con bajos salarios en Mauricio. Los trabajadores fueron golpeados por la policía por protestar por sus condiciones laborales.
Todo ello muestra un fallo en los procesos de compra ética que deben ser la norma en cualquier actividad caritativa, pero revela también la dificultad de aplicar la debida diligencia correctamente. Las cadenas de suministro son opacas deliberadamente. La ocultación de las circunstancias en que se fabrican los productos permite a los minoristas alegar una negación plausible. En pocas palabras, no podemos confiar en lo que dicen los minoristas sobre sus prácticas de aprovisionamiento, y la autorregulación no tiene ninguna credibilidad.
Necesitamos transparencia, sindicatos fuertes y directrices claras de abastecimiento. Y esto sólo puede conseguirse con un cambio estructural en las relaciones entre producción, suministro y venta al por menor, con un claro papel de los representantes de los trabajadores. La IndustriALL Global Union ha realizado una gran labor en el cambio de estas relaciones mediante la elaboración de acuerdos vinculantes con empresas mundiales.
Donde más avanzada se encuentra esta labor en la iniciativa ACT, en la que se está desarrollando una nueva forma de asegurar la rendición de cuentas en las cadenas de suministro, y se garantiza que se escucha la opinión de los trabajadores.
La IndustriALL también está pidiendo un tratado de las NU y un Convenio de la OIT sobre las cadenas de suministro. Hay que profundizar en esta labor y, lo que es sumamente importante, tienen que participar más marcas y apoyar las iniciativas que propicien una verdadera responsabilidad.