3 septiembre, 2015Unos 35.000 trabajadores se volcaron en las calles de Yakarta el 1o de septiembre para exigir un nuevo salario mínimo para el año 2016. También exigen se mejore la legislación laboral. Las principales centrales sindicales de Indonesia, la KSPI, KSPSI y KSBSI, piden que el gobierno intensifique sus medidas para proteger los intereses del pueblo.
Indonesia está pasando por una etapa de ralentización de su crecimiento económico: unos 26.000 trabajadores ya perdieron sus puestos de trabajo este año. Como una gran parte de la población de Indonesia vive en condiciones que apenas superan el nivel de la miseria, los sindicatos exigen que el gobierno central garantice la disponibilidad de puestos de trabajo, así como los derechos fundamentales de los trabajadores.
En efecto, el 1o de septiembre, miles de trabajadores realizaron manifestaciones de protesta en Yakarta y en otras 20 provincias del país. Pidieron un aumento de un 22% del salario mínimo para el año 2016 con el fin de aumentar el poder adquisitivo, así como rebaja de los precios de productos de primera necesidad, incluyendo el combustible.
Los sindicatos también exigen que los trabajadores con contrato temporal pasen a ser empleados permanentes, sobre todo en las empresas propiedad del estado, y que se liquide el Tribunal del Trabajo. En la actualidad, los alegatos en busca de justicia por vía del Tribunal del Trabajo requieren demasiado tiempo y dinero, por lo cual no es una opción confiable para resolver los conflictos laborales.
Por su parte, Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL Global Union, ha reconocido que los trabajadores y los sindicatos desempeñan un papel clave en las relaciones laborales de Indonesia:
La manifestación de 35.000 personas en Yakarta demuestra la enorme fuerza e importante función del movimiento obrero en la representación de los trabajadores. IndustriALL da su total apoyo a la lucha de los trabajadores, y pide al gobierno de Indonesia participar en las negociaciones.