22 mayo, 2024El 20 de mayo, los trabajadores de la planta de Saint-Gobain SEKURIT en Avilés, España, iniciaron una huelga de tres días para oponerse a la decisión de la empresa de cesar la fabricación de parabrisas en el sitio. El proceso de negociación sobre el cierre de la planta concluirá el 24 de mayo, y este cierre marcaría el fin de más de 70 años de una producción que ha beneficiado significativamente a la empresa.
A pesar de la productividad demostrada por la planta y de la experiencia de sus trabajadores, Saint-Gobain cita como motivos de la decisión la recesión económica durante la pandemia, una crisis de suministro de los componentes y las inciertas condiciones del mercado a futuro. En 2022, la empresa anunció un plan de reestructuración para la fabricación de parabrisas de repuesto, luego de lo cual inició procedimientos legales de despido en lugar de entablar un diálogo con el sindicato. Cuando el personal respondió con una huelga, se retiraron los despidos y se llevaron a cabo negociaciones con el sindicato.
Para transformar este negocio, Saint-Gobain propuso una inversión de 10 millones de euros en la planta de Avilés. Sin embargo, esto vino acompañado de condiciones: reducciones de personal, restricciones salariales en el convenio colectivo y salarios más bajos para las nuevas contrataciones. Aunque se redujo gradualmente el personal y se llegó a un acuerdo salarial, la tercera condición de pagar menores salarios a las nuevas contrataciones resultó inaceptable para el sindicato CCOO UGT, afiliado a IndustriALL, y la Corriente Sindical de Izquierda (CSI).
En los últimos dos años, la producción se ha trasladado gradualmente a la planta de Saint-Gobain en Kenitra, Marruecos, donde los costos laborales son más bajos. Esto ha dejado a la instalación de Avilés en una situación precaria, con pedidos insuficientes para cumplir con los requisitos de rentabilidad. Ahora, la empresa quiere cerrar las operaciones sin ofrecer ninguna alternativa.
En una carta dirigida a Saint-Gobain SEKURIT, el secretario general de IndustriALL, Atle Høie, expresó:
“IndustriALL se solidariza con los trabajadores de Avilés. Apoyamos sus esfuerzos para preservar sus puestos de trabajo e instamos a Saint-Gobain a reconsiderar su decisión por el bien de la comunidad y su dedicada fuerza laboral”.
Los sindicatos han sugerido diversas soluciones para preservar los puestos de trabajo locales, pero la empresa ha rechazado sistemáticamente estas propuestas. Los trabajadores están llevando a cabo paros parciales, manifestaciones y reuniones con dirigentes políticos para mitigar el impacto social del cierre. Los sindicatos piden a Saint-Gobain que mantenga sus compromisos de responsabilidad social y sostenibilidad, destacando las repercusiones ambientales de esta medida.
La ministra de Trabajo de España, Yolanda Díaz, criticó las justificaciones de la empresa como inadecuadas y calificó este cierre como una mala práctica. Hizo hincapié en que es inaceptable la deslocalización de la industria únicamente para aumentar la rentabilidad a expensas del aumento de los costos laborales. La ministra Díaz también anunció que los subsidios públicos recibidos por Saint-Gobain serían examinados y potencialmente reclamados si se vinculan a la deslocalización de puestos de trabajo.
ID de Shutterstock de la fotografía: 2130304655, febrero de 2022, La Défense, Francia: vista del cartel de Saint Gobain