2 junio, 2020 Después del fracaso de una tercera ronda de negociaciones a nivel del sector, en la que los empleadores ofrecieron una reducción de los salarios reales de 45.000 personas, los trabajadores del sector químico han estado llevando a cabo manifestaciones colectivas en las fábricas de toda Austria.
El sindicato PRO-GE, afiliado de IndustriALL Global Union, lidera las negociaciones junto con otro sindicato austríaco, GPA-djp, unidos frente a la postura poco razonable de los empleadores del sector químico.
Los líderes del equipo de negociación, Alfred Artmäuer de PRO-GE y Günther Gallistl de GPA-djp, declararon conjuntamente:
“Mientras el coronavirus nos obliga a distanciarnos, los trabajadores de la industria química se acercan aún más”.
La propuesta de los empleadores es que los 45.000 trabajadores del sector químico en Austria acepten una reducción de los salarios reales y beneficios con un aumento del 1,45 por ciento por debajo de la inflación.
Los negociadores sindicales explican que los trabajadores ya están pagando por la crisis económica actual causada por la pandemia de dos maneras. Debido a la recesión económica, se ha utilizado ampliamente el trabajo a tiempo parcial fomentado por el gobierno. Tanto esta práctica como el estímulo estatal de la economía se costean con los impuestos de los trabajadores. Se rechaza una tercera forma de hacer que los trabajadores paguen con la reducción de sus ingresos.
Mientras se les pide a los trabajadores del sector químico que reduzcan sus salarios, los accionistas siguen siendo recompensados con dividendos. A su vez, los negociadores sindicales les recuerdan a los empleadores que la industria tuvo un desempeño excepcionalmente bueno el año pasado.
El 4 de junio, en las ciudades de Viena y Linz, los sindicatos llevarán a cabo asambleas de trabajadores que incluirán capacitación en materia de huelgas. En estas reuniones se decidirán los pasos a seguir en caso de que los empleadores no presentan una oferta significativamente mejorada.
El 19 de mayo, los interlocutores sociales en la industria electrónica del país firmaron un acuerdo sectorial que prevé un aumento salarial del 1,6 por ciento y un pago especial libre de impuestos para cada trabajador, la “bonificación por el coronavirus”. Esta industria emplea a más de 50.000 trabajadores, que también son representados por PRO-GE y GPA-djp.
El director del sector químico de IndustriALL Global Union, Tom Grinter, expresó su solidaridad con los trabajadores austríacos:
“Es genial ver tanta energía mientras nuestros colegas sindicalistas se movilizan frente a sus fábricas en toda Austria y se niegan a ser estafados. ¡Los respaldaremos hasta llegar a un acuerdo justo!”