10 septiembre, 2016Una campaña realizada a lo largo de cuatro años y negociaciones de muchos meses por fin han terminado con un acuerdo que incluye el compromiso de pagar una indemnización de más de US$ 5 millones a los sobrevivientes y familias de los trabajadores y trabajadoras muertos en el peor accidente industrial de Pakistán.
El 11 de septiembre de 2012, más de 250 trabajadores/as perdieron la vida y más de 50 resultaron heridos en el incendio de la fábrica de prendas de vestir Ali Enterprises en Karachi. Los trabajadores y trabajadoras murieron quemados, atrapados detrás de ventanas con rejas y puertas cerradas. Para salvar la vida, algunos saltaron desde las plantas superiores, resultando con heridas que les produjeron discapacidades permanentes.
El minorista alemán KiK, la única empresa que se conozca que adquiría productos de Ali Enterprises, acaba de acordar que pagará otros US$ 5,15 millones a los sobrevivientes y familiares de las víctimas del desastre. Este caudal adicional está destinado a cubrir la pérdida de ingresos, atención médica y afines, y los costos de rehabilitación de estas personas.
Anteriormente KiK había pagado US$ 1 millón a un fondo de ayuda después de firmar un Memorando de Entendimiento con la organización laboral PILER de Pakistán en diciembre de 2012. En este Memorando, KiK también se compromete a financiar una compensación a largo plazo para las víctimas.
Sin embargo, para lograr una compensación adecuada, varias organizaciones han tenido que realizar una campaña conjunta al respecto: la Federación Sindical Nacional (NTUF), PILER, IndustriALL Global Union, internacional laboral a la que está afiliada NTUF, la Campaña Ropa Limpia (CRL) y otros aliados, incluyendo UNI Global Union.
El nuevo acuerdo de asignación de fondos se ha establecido tras negociaciones facilitadas por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) entre IndustriALL, la CRL, y KiK, a petición del Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania.
El Acuerdo tiene por objeto complementar el monto que se ha de pagar a las víctimas según los programas de seguridad social del Gobierno de Pakistán, para cumplir con los niveles de compensación que exige el Convenio 121 de la OIT sobre las prestaciones en caso de accidentes del trabajo. Se cree que a principios de 2017 se comenzará a pagar periódicamente a las víctimas el monto adicional que se les debe.
Nasir Mansoor, Secretario General Adjunto de la NTUF, señaló al respecto: “Este acuerdo histórico es sin precedentes en el contexto del movimiento laboral de Pakistán. Después de cuatro años de lucha, las víctimas de esta tragedia han logrado justicia, reconociéndose a nivel internacional su dolor y sufrimiento. Estamos muy agradecidos a IndustriALL y a la CRL, que abogaron con éxito por las reivindicaciones de estos trabajadores y trabajadoras. La OIT también ha desempeñado un papel vital para hacer posible este histórico acuerdo. Con este triunfo debemos recordar que la seguridad en el lugar de trabajo es un derecho, no un privilegio”.
Saeeda Khatoon, viuda y vicepresidenta de Ali Enterprises Factory Fire Affectees Association, perdió a su único hijo en el incendio. Ella comentó: “Este triunfo constituye un alivio para las familias de las víctimas ya que se han escuchado sus gritos de reclamo. Sabemos que nuestros seres más queridos nunca volverán, pero esperamos que este tipo de tragedia nunca vuelva a suceder. El gobierno, las marcas y los dueños de las fábricas deben cumplir estrictamente con las normas laborales y de seguridad en las fábricas”.
Por su parte, Karamat Ali, Director Ejecutivo de PILER, señaló: “Aunque los pagos acordados no traerán de vuelta a sus seres queridos, esperamos que alivien los problemas económicos de estas familias. Para concientizar y mejorar la seguridad en los lugares de trabajo, pedimos al gobierno de Pakistán que declare el 11 de septiembre como Día de Seguridad de los Trabajadores y Trabajadoras”.
Por su lado, Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL, dijo: “Por fin, hemos logrado un acuerdo de compensación que proporcionará algo de justicia a los sobrevivientes y familias de los fallecidos. Felicitamos a KiK por haber asumido su responsabilidad al respecto, procurando que las víctimas reciban compensación, cumpliendo con las normas internacionales establecidas. Ya es hora de empezar a crear una industria de la confección más segura en Pakistán, tal como lo estamos haciendo actualmente con el Acuerdo de Bangladesh”.
Apenas unas semanas antes del fatal incendio, Ali Enterprises recibió certificación SA 8000 de la firma de auditoría Social Accountability International, que supuestamente señalaba que el edificio donde se produjo la tragedia había cumplido con las normas internacionales en nueve áreas, incluyendo la salud y seguridad. La tragedia que se produjo poco después deja al descubierto el fracaso de los modelos de auditoría social y plantea asuntos de grave preocupación respecto a la calidad de las inspecciones de seguridad en Pakistán, así como la aplicación de las leyes laborales y de los códigos de seguridad de los edificios.
Ineke Zeldenrust, de la Campaña Ropa Limpia, dijo: “Acogemos con mucho agrado el hecho de que KiK haya reconocido su obligación de proporcionar una compensación para estas familias. Este Acuerdo es un excelente ejemplo de cómo los compradores pueden y deben asumir la responsabilidad de muertes y lesiones relacionadas con lugares de trabajo en sus cadenas de suministro, especialmente en aquellos países donde se sabe que no hay seguridad en el ambiente laboral. Los trabajadores y trabajadoras de la confección en Pakistán siguen corriendo peligro. Ahora todos los compradores deben concentrarse en procurar que medidas apropiadas y eficaces de debida diligencia y remediación se pongan en marcha para evitar que en el futuro se produzcan incidentes terribles como éstos”.
El Acuerdo señalado es el tercero de una serie de acuerdos de compensación que el movimiento sindical ha logrado por vía de negociaciones después de las catástrofes a gran escala que se han producido en el sector de la confección de prendas de vestir en Tazreen Fashions en 2012 y en Rana Plaza en 2013. Estos dos siniestros se produjeron en Bangladesh.
Un breve resumen del Acuerdo:
- Los US$5,15 millones que pagará KiK incluirán un margen de US$250.000 para cubrir fluctuación de los costos; por lo tanto, se asignarán US$4,9 millones a los sobrevivientes y familias afectas.
- La aplicación, administración y supervisión del Acuerdo se establecerán en base a un proceso facilitado por la OIT. Se realizarán en estrecha consultación con las personas correspondientes afectadas y las partes interesadas. La Corte Suprema de Sindh se encargará de las funciones de supervisión.
- En total, el Acuerdo aportará US$ 6,6 millones al proceso de compensación. KiK proveerá US$ 5,9 millones, y los programas de seguridad social de Pakistán (SESSI y EOBI), junto con los propietarios de Ali Enterprises, han de contribuir US$ 700.000.
- Se les pagará una pensión mensual a las víctimas que así lo soliciten. El monto variará de acuerdo a la situación financiera de la persona y el número de familiares dependientes.
- Las pensiones no se basarán en el nivel de un sueldo digno, porque las normas internacionales para compensación por lesiones en el trabajo están basadas en el cálculo de los salarios reales obtenidos. Sin embargo, en el Acuerdo para Ali Enterprises, se usa un modelo generoso para calcular los salarios reales, y las pensiones están indexadas de acuerdo con la tasa de inflación.
- El Acuerdo no cubre daños y perjuicios por dolor y sufrimiento.
- Se puede ver aquí una declaración de la OIT sobre el Acuerdo.
Para mayor información, rogamos contactar a Leonie Guguen, Encargada de Comunicaciones, IndustriALL Global Union, [email protected]. Tel: +41 79 137 5436.