13 junio, 2022En una decisión histórica, la Conferencia Internacional del Trabajo, celebrada en Ginebra en junio, incorporó la salud y la seguridad a los Principios y derechos fundamentales en el trabajo de la OIT.
Se estima que más de 3 millones de trabajadores pierden la vida cada año a causa de su trabajo y que decenas de millones resultan heridos.
La decisión de la CIT de convertir la salud y la seguridad en un principio y un derecho fundamental en el trabajo, adoptada el 10 de junio, significa que todos los Estados miembros de la OIT deben comprometerse a respetar y promover el derecho fundamental a un entorno de trabajo seguro y saludable, hayan o no ratificado los convenios pertinentes de la organización.
“Se trata de una gran victoria sindical y un paso crucial para hacer que la vida laboral sea más segura para los trabajadores del mundo”,
expresó Atle Høie, el secretario general de IndustriALL.
“Este es un hito en los esfuerzos mundiales para detener la marea de muertes en el mundo del trabajo. Ahora podremos esperar un futuro mejor, donde los trabajadores tendrán la certeza de que la salud y la seguridad serán un principio y un derecho fundamental en el trabajo”.
Esta es la primera ampliación de los derechos humanos fundamentales de los trabajadores desde que se adoptaron estos cuatro derechos en 1998:
- la libertad sindical y el reconocimiento efectivo del derecho de negociación colectiva;
- la eliminación del trabajo forzoso u obligatorio;
- la abolición del trabajo infantil;
- la eliminación de las prácticas de discriminación en materia de empleo y ocupación.
Cada uno de los principios fundamentales está asociado con los convenios más relevantes de la OIT. Los nuevos convenios fundamentales serán el Convenio sobre seguridad y salud de los trabajadores (n.o 155), de 1981, y el Convenio sobre el marco promocional para la seguridad y salud en el trabajo (n.o 187), de 2006.