5 septiembre, 2022La Federación de Sindicatos Libres del Reino de Camboya (FTUWKC), afiliada a IndustriALL, ha sido objeto de intimidación policial durante las negociaciones sobre el salario mínimo en todo el país para el sector textil y de la confección.
Mientras el Consejo Nacional de Salario Mínimo de Camboya (NCMW) iniciaba las negociaciones tripartitas sobre el salario mínimo para 2023 en agosto, las afiliadas de IndustriALL Global Union FTUWKC, la Coalición Sindical Democrática de Trabajadores de la Confección de Camboya (CCAWDU) y el Sindicato Colectivo del Movimiento de Trabajadores (CUMW) iniciaron una campaña para exigir un salario mínimo de US$ 215.
El 1 de septiembre, la policía suspendió la producción en la fábrica 2 de Shoe Premier, en la provincia de Takeo, y ordenó a la FTUWKC que eliminara las publicaciones relacionadas con la campaña de la página de Facebook del sindicato.
Los agentes policiales intimidaron a la presidenta local de la FTUWKC, Sao Thoeurn, exigiéndole que firmara un acuerdo que los comprometía a no hacer más publicaciones en Facebook que “pudieran generar problemas que afecten a la sociedad”.
“Estas prácticas de intimidación y hostigamiento por parte de las autoridades son inaceptables. Tenemos derecho a expresarnos en la campaña por el salario mínimo a nivel nacional. Instamos a las autoridades a que dejen de acosar a la FTUWKC”,
declaró Sony Say, vicepresidente del FTUWKC.
La guerra en Ucrania y la subsiguiente crisis energética han aumentado significativamente el costo de vida de los trabajadores de la confección camboyanos. Teniendo en cuenta además el incremento de la tasa de inflación al 6.5 % en la primera mitad de 2022, los sindicatos camboyanos exigen al Gobierno un aumento del salario mínimo en el sector textil y de la confección del país de US$ 194 a US$ 215.
“Los trabajadores camboyanos de la confección necesitan un salario mínimo de US$ 215 para 2023. Las ganancias del sector siguen creciendo y, al mismo tiempo, el costo de vida aumenta rápidamente”,
indicó Athit Kong, presidente de la CCAWDU.
Christina Hajagos-Clausen, directora del sector textil de IndustriALL, expresó:
“Los sindicatos de Camboya exigen un aumento que refleje el incremento del costo de vida. IndustriALL apoya la exigencia de fijar el salario mínimo en el sector textil y de la confección en US$ 215.
Pero, además, es crucial que los sindicalistas tengan la libertad de hacer públicas sus demandas y que no se interfiera con su libertad de expresión”.