22 enero, 2019La Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha reivindicado un programa centrado en las personas para el futuro del trabajo en un informe histórico publicado hoy en su sede de Ginebra (Suiza).
Una Garantía Laboral Universal, la protección social desde el nacimiento hasta la vejez y el derecho a la formación permanente figuran entre las diez recomendaciones formuladas por la Comisión Mundial sobre el Futuro del Trabajo, de la OIT.
La Comisión, creada en octubre de 2017, está copresidida por el presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, y el primer ministro sueco, Stefan Löfven, dos antiguos líderes de sindicatos afiliados a la IndustriALL Global Union.
"Nos esperan innumerables oportunidades para mejorar la calidad de vida de los trabajadores, ampliar las opciones disponibles, cerrar la brecha de género, revertir los estragos causados por las desigualdades a nivel mundial y mucho más. Sin embargo, nada de esto ocurrirá por sí mismo. Sin esas medidas enérgicas nos dirigiremos a un mundo en el que se ahondarán las desigualdades e incertidumbres existentes", dice el informe.
El informe "Trabajar para un futuro más prometedor" llega en un momento tumultuoso en el que la digitalización, la automatización y la robótica transforman el mundo del trabajo. En él se propone un enfoque de la inteligencia artificial bajo control humano y se exige una mayor inversión en las capacidades de las personas, las instituciones laborales y un trabajo decente sostenible.
“Los trabajadores tienen que mejorar las calificaciones a lo largo de su vida. Los gobiernos, los trabajadores, los empleadores y las instituciones educativas tienen que crear un sistema de aprendizaje permanente. Este informe ofrece formas concretas para hacerlo", dijo el presidente sudafricano en la ceremonia de lanzamiento.
Entre las diez recomendaciones figuran las siguientes:
- Una Garantía Laboral Universal que proteja los derechos fundamentales de los trabajadores, un salario vital adecuado, limitación de las horas de trabajo y lugares de trabajo seguros y saludables.
- Protección social garantizada desde el nacimiento hasta la vejez, que subvenga a las necesidades de las personas a lo largo de su ciclo de vida.
- Un derecho universal a la formación permanente que permita a las personas adquirir competencias, perfeccionarlas y reciclarse profesionalmente.
- La gestión del cambio tecnológico para impulsar el trabajo decente, incluido un sistema de gobernanza internacional para las plataformas de trabajo digitales.
- Mayores inversiones en el cuidado, las economías verdes y rurales.
- Un programa transformador y mensurable para lograr la igualdad de género.
- La remodelación de los incentivos comerciales para fomentar las inversiones a largo plazo.
En el informe se pide a los gobiernos que garanticen la representación colectiva de los trabajadores y de los empleadores a través del diálogo social como bien público, promovido activamente por políticas públicas. "Todos los trabajadores deberán disfrutar de la libertad sindical y del derecho de su negociación colectiva, con el Estado como garante de esos derechos", reza el informe.
“Este es un informe riguroso que ofrece las bases para crear plataformas para un mundo justo y equitativo del trabajo basado en el diálogo social, la inversión en las personas, las protecciones sociales y la protección de los derechos fundamentales de los trabajadores", dijo Valter Sanches, secretario general de la IndustriALL.
"Pedimos a todos nuestros afiliados que participen en los debates del informe, y que ejerzan presión sobre sus gobiernos para adoptar sus recomendaciones mediante políticas públicas, legislación y regulación. Esperamos que los gobiernos y los empleadores respalden plenamente las recomendaciones del informe, puesto que se han elaborado en un proceso de consenso en el que han intervenido representantes de los interlocutores sociales."