23 octubre, 2014Dirigentes de afiliados de África Subsahariana (ASS) escucharon informes sobre la labor de la IndustriALL en la región centrada en la sindicación y el crecimiento, y debatieron la necesidad de la justicia económica y social con el fin de construir África.
Unos 150 dirigentes sindicales de 28 países africanos se reunieron en la Conferencia Regional de ASS de la IndustriALL, celebrada en Pretoria del 14 al 16 de octubre de 2014. Si bien hubo mucha reflexión interna sobre la necesidad de construir sindicatos fuertes y sobre la unidad entre trabajadores a nivel nacional e internacional, los debates se centraron en los factores externos que afectan al progreso social y económico en el continente.
Los participantes destacaron la importancia de la industria manufacturera como motor del crecimiento de las economías nacionales. Los afiliados se comprometieron a priorizar el desarrollo industrial abordando la cuestión con sus centros nacionales y tratando de influir en sus gobiernos al respecto. Los afiliados reconocen que será la clave de la creación de fuerza sindical y capacidad para exigir políticas industriales globales y estratégicas, con inclusión de la educación de los miembros y la sensibilización del público para luchar por políticas que beneficien a la clase trabajadora. A nivel regional existe el compromiso de desarrollar políticas conjuntas centradas en organismos intergubernamentales regionales como la SADC, la CEDEAO, la CAO, la CEMAC y la Unión Africana, y la movilización regional sobre el Día de la Industrialización de África, el 20 de noviembre.
El secretario general de la IndustriALL, Jyrki Raina, dijo:
Esta vibrante conferencia organizada por los sindicatos sudafricanos inspirará a los afiliados a la IndustriALL de todo el continente en nuestra lucha conjunta para crear una base industrial fuerte en toda África con el fin de proporcionar empleos de calidad a los trabajadores y forjar sociedades basadas en la justicia social y económica.
Existe una gran preocupación por el nivel del trabajo precario en la región, especialmente en las empresas multinacionales, a las que no se está considerando responsables de las malas prácticas laborales. Las deficientes normas de la salud y la seguridad son igualmente preocupantes. Otra inquietud en África son los bajos salarios, en algunos casos inferiores al umbral de la pobreza, que pueden observarse en todos los sectores organizados por los afiliados a la IndustriALL. La Conferencia decidió que África y el mundo necesitan un aumento salarial inmediato. Los afiliados seguirán movilizando, organizando y defendiendo los derechos de los trabajadores para asegurar el empleo sostenible y salarios dignos en lugares de trabajo más seguros y saludables.
Se debatió a fondo la intervención y la participación de las mujeres en las actividades sindicales a todos los niveles. La Conferencia de las Mujeres del África Subsahariana fue la tercera en la región en abogar por una cuota del 40 por ciento de las mujeres a todos los niveles de la IndustriALL. Los delegados se comprometieron a intensificar sus esfuerzos con miras a la ratificación y aplicación del Convenio núm. 183 de la OIT sobre la protección de la maternidad. Desde la adopción de este Convenio hace 14 años, sólo tres países africanos lo han ratificado.
La Conferencia condenó firmemente al Gobierno de Swazilandia por disolver el Trade Union Congress of Swaziland (TUCOSWA) y la Amalgamated Trade Unions of Swaziland (ATUSWA) e instó al Gobierno a revocar esta decisión y a entablar un verdadero diálogo con los sindicatos sobre las reformas legislativas que garanticen el respeto de los derechos de los trabajadores de conformidad con las obligaciones internacional de Swazilandia sin más demora.
La Conferencia resaltó la importancia de la paz y la estabilidad en la región y pidió a todos los gobiernos africanos que garanticen la paz y la estabilidad. Los delegados coincidieron en que el ébola está planteando asimismo una verdadera amenaza para la vida humana y la estabilidad económica en África Occidental y que para erradicarla se requiere una respuesta internacional.