3 marzo, 2014El 1ͦ de marzo, IndustriALL se unió a 12.000 personas en una masiva manifestación en Berna para protestar contra el voto anti-inmigración del mes pasado en Suiza.
El 9 de febrero, los suizos fueron a las urnas para votar sobre la imposición de cuotas para la inmigración. Esta divisoria política fue aprobada por una pequeña mayoría de apenas 50,3%. Una delegación de IndustriALL se unió a los miembros de su afiliado Unia y otros sindicatos suizos en una manifestación de protesta realizada el 1ͦ de marzo frente al Parlamento suizo. Esta acción tuvo como finalidad combatir la discriminación contra los extranjeros.
Los sindicatos denuncian las intenciones segregacionistas del Parlamento suizo, que afecta la esencia de las libertades de Europa y la libertad de los trabajadores para ganarse la vida en todas partes del continente. Aunque Suiza no forma parte de la Unión Europea (UE), el país está relacionado con la UE a través de numerosos acuerdos bilaterales, incluidos pactos que abarcan la libertad de trabajo.
Fernando Lopes, Secretario General Adjunto de IndustriALL, quien participó en esta manifestación, dijo:
"Apoyamos a los sindicatos suizos en su lucha por una Suiza abierta y tolerante. No se trata solamente de que sean extranjeros el 20% de todas las personas en Suiza: además, más del 30% de todos los empleados provienen de otros países. Por ejemplo, el personal de la oficina de IndustriALL está compuesto de 26 nacionalidades diferentes".
"Como creadores de riqueza para Suiza, los inmigrantes tienen el derecho de estar aquí y de ser tratados de una manera no discriminatoria. Seguiremos apoyando al 49,7% de los votantes suizos que dijeron "no" a esta iniciativa, así como a los extranjeros, que constituyen el 20% de los habitantes de Suiza".
Junto con la Confederación Suiza de Sindicatos y otros asociados, Renzo Ambrosetti, Unia, y el movimiento sindical suizo se comprometieron a hacer campaña en contra todas las leyes discriminatorias sobre permisos de residencia.
Renzo Ambrosetti, copresidente de Unia y miembro del comité ejecutivo de IndustriALL, señaló al respecto:
"Esta decisión es un enorme revés para los inmigrantes en Suiza, para los sindicatos y para todas las fuerzas progresistas. Esto llevará a Suiza a un callejón sin salida."