23 octubre, 2019IndustriALL Global Union le escribió al presidente de Irán para exigir la liberación de 21 trabajadores detenidos después de manifestarse en Azarab Industries, en Arak, y condenó el brutal uso de la fuerza ejercido contra manifestantes pacíficos en la fábrica de la empresa.
El 20 de octubre, los trabajadores de Azarab, que están en huelga desde el 6 de octubre, fueron cruelmente golpeados por la policía antidisturbios. Varias personas resultaron heridas y fueron trasladadas al hospital, pero se informa que ellas mismas se dieron de alta por miedo a ser arrestadas.
Los trabajadores exigen el pago de salarios atrasados y que la empresa de fabricación industrial que construye centrales eléctricas y plantas petroquímicas vuelva a ser propiedad del Estado.
Ellos afirman que Azarab Industries se vendió de forma ilícita a su actual dueño, Qaleh-bani, que ignora los problemas laborales y ha sido negligente en el pago a los trabajadores.
El 21 de octubre, el fiscal de Arak, Abbas Qassemi, presuntamente confirmó el arresto y detención de 21 trabajadores. Mientras tanto, el clima de seguridad de Arak se encuentra tenso y las exigencias de los empleados aún no se han satisfecho.
“Es extremadamente preocupante que exactamente un mes después de haberle enviado otra carta lamentando los ataques brutales a los trabajadores de HEPCO, quienes también estaban ejerciendo su derecho legítimo a la manifestación pacífica, nos veamos obligados a comunicarnos de nuevo con usted para llamarle la atención sobre el ataque brutal practicado por las fuerzas de seguridad contra los pacíficos trabajadores de Azarab en Arak”,
expresó el secretario general de IndustriALL, Valter Sanches, en una carta al presidente Hassan Rouhani.
“IndustriALL Global Union insta al gobierno iraní a respetar las normas fundamentales del trabajo nacionales e internacionales y de este modo poner fin a la represión sobre los trabajadores que ejercen su derecho legítimo a manifestarse pacíficamente en público, así como a liberar de inmediato a todos los trabajadores de Azarab detenidos el 20 y 21 de octubre en Arak”.
Maziyar Gilaninejhad, portavoz del Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos y Mecánicos de Irán (UMMI), pidió que las plantas industriales y de fabricación regresen al sector público e instó al gobierno a cancelar la privatización de Azarab Industries. A su vez, añadió:
“El gobierno debe lograr que Azarab Industries se comprometa a pagar los salarios atrasados lo más pronto posible. Exigimos que la policía no interfiera en los asuntos relacionados al trabajo o en las protestas y huelgas legítimas de los trabajadores”.
Gilaninejhad pidió al Ministro de Trabajo que defienda los derechos de los trabajadores de conformidad con lo dispuesto en la Constitución y la legislación laboral y que intervenga en los conflictos laborales antes de que lleguen a un punto crítico.