29 abril, 2024El 28 de abril de 2024, se celebró un evento conmemorativo en Morowali, Sulawesi Central, Indonesia, para rendir homenaje a los 21 trabajadores fallecidos en la explosión de un horno en PT Indonesia Tsingshan Stainless Steel (ITSS). Participaron IndustriALL Global Union y afiliados indonesios.
El secretario general adjunto de IndustriALL, Kan Matsuzaki, pidió un momento de silencio para honrar a los trabajadores que perdieron la vida y resultaron heridos en el trabajo, e instó a los participantes a continuar luchando por la vida, tanto en ITSS como en el Parque Industrial Morowali de Indonesia (IMIP). Insistió en la importancia de proteger el bienestar de los trabajadores en toda la industria y destacó la necesidad de redoblar los esfuerzos para mejorar las normas de seguridad en el lugar de trabajo.
“La industria del níquel en Indonesia está creciendo rápidamente, pero la salud y la seguridad laboral (SSL) han quedado rezagadas en muchos lugares de trabajo. Existe una escasez de educación y capacitación adecuadas, no se implementan los derechos normativos y, lo que es más importante, faltan comités conjuntos en materia de SSL. Debemos esforzarnos por sindicalizar a más trabajadores, crear convenios colectivos sólidos y hacer que los lugares de trabajo sean seguros para todos”,
expresó Matsuzaki.
Además, afirmó que, en este Día Mundial de la Seguridad y la Salud en el Trabajo, es fundamental recordar la alarmante realidad de que 3 millones de trabajadores mueren cada año por causas relacionadas con el trabajo, y decenas de millones más resultan heridos. IndustriALL se comprometió a apoyar a sus afiliados en Indonesia en su campaña por la ratificación de los Convenios 155 y 176 de la OIT, en defensa del derecho de los trabajadores indonesios a estar informados, a participar y a negarse a realizar tareas peligrosas.
En un testimonio conmovedor, algunos sindicalistas que presenciaron la explosión del horno desde el suelo relataron su experiencia. En un acto de inmenso coraje, atajaron y salvaron a dos trabajadores, un indonesio y un chino, que caían desde una altura de 50 metros. Luego descubrieron, con enorme indignación, una pila de cadáveres cerca del horno, que funcionaba a 1200 grados centígrados.
“No se realizaron simulacros de emergencia por accidentes industriales en la planta, la empresa solo organizó simulacros de incendio. Los trabajadores no sabían cómo evacuar el lugar para salvarse. Exigimos que la empresa organice simulacros de emergencia de forma periódica para evitar que esto se repita en el futuro”,
añadieron los sindicalistas.
Otros sindicalistas de la mina denunciaron infracciones de los protocolos de seguridad, y explicaron que se instruyó a los trabajadores que realizaran actividades de producción y reparación de manera simultánea. Estos trabajadores, que habían sido trasladados desde la otra empresa del IMIP, no sabían dónde estaba la salida de emergencia y perdieron la vida. La falta de ambulancias, clínicas e instalaciones médicas adecuadas para un sitio tan grande como el IMIP empeoró la situación.