19 marzo, 2014El derrumbe del techo que causó 28 muertos en la mina Grasberg en Indonesia en 2013 se podría haber evitado, según la Comisión Nacional Indonesia de Derechos Humanos.
En mayo de 2013, el techo de un túnel subterráneo no operacional se derrumbó durante una sesión de capacitación en la mina de cobre Grasberg de Freeport-McMoran en Indonesia, muriendo 28 mineros y resultando heridos otros diez. El accidente, que sólo puede calificarse de homicidio industrial, se produjo durante un curso de seguridad.
Se llevó a cabo una investigación del accidente, de la que se excluyó de participar activamente al sindicato CEMWU (FSPKEP-SPSI), afiliado a la IndustriALL Global Union. Aunque el informe no era confidencial, las conclusiones no se hicieron públicas.
La Comisión Nacional Indonesia de Derechos Humanos (Komnas HAM) ha descubierto ahora que la compañía podía haber evitado la excavación en Grasberg, en la que murieron 28 personas el año pasado.
“PT Freeport podía haber impedido que sucediera esto, pero no lo hizo. La falta de esfuerzo puso en peligro la vida de otros. La gravedad de este caso es grande”, dijo el comisionado de Komnas HAM Natalius Pigai el viernes, citado por kompas.com.
También observó que se habían cometido violaciones de los derechos humanos, y pidió al Gobierno que siguiera el informe de la comisión investigando a fondo el incidente para descubrir cualquier indicio de negligencia.
A raíz del accidente industrial en la mina de cobre Grasberg de Freeport-McMoran en Indonesia, delegados sindicales, entre ellos representantes de la IndustriALL, se desplazaron a la región en una misión de solidaridad en septiembre de 2013. La misión llegó a la conclusión de que el accidente se debió a la negligencia de la dirección. No se pudieron aportar pruebas de inspecciones sobre evaluación del riesgo antes del accidente.
Kemal Özkan, secretario general adjunto de la IndustriALL Global Union, dice:
“Rio Tinto presenta un bonito panorama de la salud y la seguridad, pero la realidad muestra lo contrario. Controla el 40 por ciento de la mina de Grasberg, pero todavía no ha asumido la misma responsabilidad.”
Con el fin de evitar más tragedias en la minería, Rio Tinto debe proporcionar los recursos que respondan a sus promesas y tomar en serio la salud y la seguridad de sus trabajadores.