10 mayo, 2017La empresa minera PT Freeport Indonesia está despidiendo a aquellos trabajadores/as que se declaren en huelga en la mina de Grasberg.
El 1o de mayo, más de diez mil mineros, miembros del Sindicato de Trabajadores de la Industria Química, Energética y Minas (CEMWU), organización afiliada a IndustriALL Global Union, emprendieron una huelga de 30 días en protesta por la política de la empresa de obligar a su personal a retirarse con permiso temporal.
Por otra parte, los trabajadores/as subcontratados también se sumaron a la huelga el 9 de mayo.
La empresa calificó la huelga como ilegal, informando que la administración considerará que los trabajadores/as en huelga están faltando al trabajo sin permiso, y que todo trabajador se ausente durante cinco días pierde su trabajo.
Hasta la fecha, la empresa ha despedido a 178 trabajadores/as, y se prevé el despido de otros 44 en esta semana y 83 más adelante. La compañía ha señalado que debido a que la mina es de importancia estratégica nacional, toda protesta está prohibida, y no se permite que los trabajadores/as en huelga estén presentes en las instalaciones de la empresa.
El sindicato siguió el debido proceso legal antes de iniciar la huelga, pero no ha habido dictamen judicial sobre la legalidad de esta acción de protesta. En Indonesia es ilegal despedir a los trabajadores por haber declarado una huelga.
La disputa tiene sus orígenes en un conflicto entre la empresa y el gobierno de Indonesia. Grasberg es una enorme mina de cobre y oro a cielo abierto que se puede ver desde el espacio, situada en las montañas de Papua, Indonesia. 32.000 trabajadores/as laboran en la mina, que en términos de magnitud es la segunda mina del mundo. Desde 1967, se ha encargado de sus operaciones PT Freeport Indonesia, filial local de Freeport-McMoRan, empresa con su casa matriz en Phoenix, Estados Unidos.
Freeport se halla en conflicto con el gobierno de Indonesia sobre el futuro de la mina a largo plazo. La mina ha sido tema polémico desde hace tiempo, debido al daño ambiental que produce, las aspiraciones del movimiento separatista de Papua, la percepción de que la mina no trae beneficios para la comunidad local, y acusaciones de corrupción. En Indonesia se ha pedido nacionalización de la mina.
Respondiendo a este ambiente político, el gobierno de Indonesia prohibió las exportaciones de cobre y puso en duda el contrato de Freeport. La empresa respondió, reduciendo la producción y reteniendo las inversiones. Recientemente, tras una visita de Mike Pence, Vicepresidente de EE.UU., se restableció el permiso de exportación de Freeport. Carl Icahn, multimillonario donante de Trump, tiene importantes inversiones en la empresa.
Para economizar costos, Freeport introdujo una política de suspensión temporal de los trabajadores/as, dándoles permiso de larga duración con poco preaviso. Aunque el permiso es pagado, el personal pierde muchos beneficios, incluyendo horas extras y alojamiento. Los trabajadores/as fueron desalojados de las viviendas de la empresa con sólo dos días de preaviso.
Los trabajadores/as temen que este programa de suspensión temporal sea precursor de futuros despidos de la empresa, y que no recuperen su trabajo.
Bajo un acuerdo con la compañía, existe un Panel Especial de Arbitraje para resolver conflictos. Sin embargo, este sistema de permisos fue introducido en forma unilateral, sin consultación con los sindicatos, y también se seleccionó en forma arbitraria a los trabajadores/as que iban a tener suspensión temporal. La empresa también ha reducido el trabajo del personal subcontratado. Esta situación ha causado mucha incertidumbre para los trabajadores y sus familias.
El CEMWU ha instado tanto al gobierno como a la empresa para que resuelvan este conflicto y ha alentado al gobierno a proporcionar un marco legal claro para que la empresa pueda invertir a largo plazo. El CEMWU ha escrito a la empresa tres veces pidiendo negociaciones sobre las medidas de reducción de costos, y que intervenga el gobierno.
El CEMWU en Freeport señaló al respecto:
La emblemática mina de Grasberg es la mayor mina de oro del mundo, además de ser la mina con los más bajos costos de producción. Trágicamente, los verdaderos dueños de la tierra, los trabajadores indonesios de Freeport, han muerto luchando para hacer valer sus derechos en su propia tierra contra una compañía extranjera.
IndustriALL ha escrito a la empresa y al gobierno de Indonesia en más de una ocasión. En una carta que se envió a Freeport-McMoRan el 5 de mayo, el Secretario General de IndustriALL, Valter Sanches, pidió a la empresa intervenir para procurar que su filial local trate de manera justa a los trabajadores/as.
Valter Sanches señaló:
“La situación en Grasberg es compleja, involucrando a los sindicatos, la compañía y el gobierno. Este conflicto sólo puede resolverse mediante el diálogo y la negociación. La decisión de Freeport de despedir a los trabajadores/as en huelga es inaceptable y empeora la situación.
“Pedimos a la empresa entablar negociaciones con el sindicato, y también que trabaje con el gobierno para buscar una solución justa”.