3 julio, 2019Los sindicatos en Asia y el Pacífico han instado a los gobiernos de la región a asegurar que el propuesto acuerdo comercial de la Asociación Económica Integral Regional (RCEP) cumpla con cinco condiciones clave que exigen los sindicatos.
A los sindicatos les preocupa que las negociaciones secretas de la RCEP puedan anular las decisiones democráticas y la soberanía estatal en favor de las corporaciones multinacionales. Los sindicatos exigen lo siguiente:
- Que los gobiernos participantes cumplan con los Convenios fundamentales de la OIT
- Que se eliminen los mecanismos de solución de controversias entre inversores y estados, que constituyen una amenaza para la democracia al otorgar a las empresas el derecho de demandar a los gobiernos
- Que la contratación pública y los servicios públicos no se incluyan en la RCEP
- Que los documentos de las negociaciones estén a disposición del público, con un proceso de consultación para las partes interesadas
- Que los gobiernos hagan una evaluación del impacto de la RCEP en los derechos humanos y que presenten sus conclusiones a asambleas democráticas.
La RCEP es un propuesto acuerdo de libre comercio entre los estados miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) (Brunei, Camboya, Indonesia, Laos, Malasia, Myanmar, Filipinas, Singapur, Tailandia y Vietnam), y China, Japón, Corea del Sur, India, Australia y Nueva Zelandia.
El acuerdo propuesto regirá el comercio en el bloque económico más grande del mundo, que abarca a la mitad de la población mundial. Junto con la última ronda de negociaciones realizada en Melbourne el 30 de junio de 2019, los sindicatos de Asia y el Pacífico, entre ellos IndustriALL Global Union, la ICM, UITA, UNI, la Federación Internacional de Trabajadores del Hogar y el Consejo Sindical de Empleados de Servicios de ASEAN y sus afiliados, exigieron a los gobiernos participantes que la RCEP cumpla con las cinco exigencias clave de los sindicatos.
Los sindicatos publicaron un comunicado en que señalan lo siguiente:
“Representando a millones de trabajadores y trabajadoras de esta región, registramos nuestra grave preocupación por las negociaciones secretas del mega acuerdo comercial regional que se hallan en curso desde 2013. Este acuerdo abarca una región donde vive el 50% de la población mundial, que produce un 30% del PIB mundial y un 25% de las exportaciones mundiales.
“Es de gran preocupación para los sindicatos y las organizaciones de la sociedad civil que las empresas multinacionales aprovechen los acuerdos comerciales cada vez más para anular las políticas nacionales, creando un entorno favorable para las empresas que pueda aumentar al máximo sus beneficios económicos a expensas de la fuerza de trabajo y los derechos humanos”.
Por su parte, Annie Adviento, secretaria regional de IndustriALL, afirmó:
“Un acuerdo comercial establecido mediante negociaciones que se hayan realizado correctamente puede producir paz y prosperidad compartidas para los pueblos de la región. Pero tenemos que asegurarnos de que el acuerdo beneficie a las personas, y no solo al capital. No vamos a permitir que las corporaciones multinacionales derroquen nuestra democracia, socavando nuestros servicios públicos a través de acuerdos que se hayan establecido por vía de negociaciones secretas”.