4 octubre, 2017Ihar Komlik fue puesto en libertad el 2 de octubre de 2017 después de firmar un documento en que se compromete a no salir del país. Komlik, quien es dirigente sindical y director de contabilidad del Sindicato de Trabajadores de Radio y de la Industria Electrónica de Bielorrusia (REP), organización afiliada a IndustriALL, fue detenido por dos meses, desde el 2 de agosto. Sigue la investigación criminal contra él y Gennady Fedynich, Presidente del REP y miembro del Comité Ejecutivo de IndustriALL.
Komlik y Fedynich fueron detenidos por supuesta evasión de impuestos a gran escala ocurrida en 2011. En agosto, Fedynich, después de un interrogatorio, fue puesto en libertad, en tanto Komlik fue enviado a un centro de detención para prisioneros previo al juicio, y más tarde lo trasladaron a una cárcel en Minsk.
Según se ha informado, Komlik fue encarcelado por haber utilizado su derecho constitucional, negándose a hacer declaraciones contra sí mismo. Después de ser puesto en libertad, Komlik explicó por qué tenía que recurrir a este derecho:
“Mi racionamiento fue el siguiente: apenas llegué a la oficina de investigación, los comentarios que escuché me permitieron entender que el caso no estaba dirigido contra mí personalmente, sino contra el sindicato. Por lo general, los investigadores trabajan de la siguiente manera: una vez que se encuentra alguna infracción, exigen pagar impuestos por alguna cantidad determinada; al investigador no le importa de dónde se consigue este dinero. En mi caso, me dijeron inmediatamente: ‘¡Oh, no es un gran problema que los impuestos no se hayan pagado, ustedes tienen una oficina! Es cuestión simplemente de vender la oficina y pagar’. Pero todos sabemos que, al vender nuestra oficina, nuestra organización caería bajo la ley de domicilio legal (Aclaración editorial: en Bielorrusia, no se permite que funcionen organizaciones que carecen de domicilio legal). El sindicato REP tendría que cerrar inmediatamente. Y, por los comentarios que escuché, comprendí inmediatamente de dónde soplaba el viento. Creo que los funcionarios entendieron que se trataba de un caso político”.
Anteriormente, IndustriALL, junto con la Confederación Sindical Internacional, se dirigió a las autoridades de Bielorrusia, exigiendo que se retiren todas las acusaciones contra Fedynich y Komlik.
Hasta ahora, la investigación continúa; en la actualidad, ambos dirigentes han sido calificados como testigos del caso, pero si los declaran culpables pueden enfrentar hasta siete años de cárcel y que les decomisen su propiedad privada.
Por su parte, Kemal Ozkan, Secretario General Adjunto de IndustriALL, señaló:
Por cierto acogemos con satisfacción la puesta en libertad de nuestro compañero de Bielorrusia. Sin embargo, no hemos cambiado lo que exigimos inicialmente: todavía queremos que se retiren todas estas falsas acusaciones dirigidas a socavar a nuestro sindicato afiliado en Bielorrusia. No vamos a permitir que los dirigentes sindicales de Bielorrusia sean tratados como criminales. Esto no está en consonancia con la Constitución de Bielorrusia ni con sus obligaciones internacionales.