14 marzo, 2013Con las huelgas en las obras de su nueva central eléctrica de Medupi y en las operaciones de carbón de Exxaro Resources han aumentado las dificultades de la compañía eléctrica Eskom para afrontar los desafíos del suministro de energía.
Las malas relaciones de trabajo contribuyen a los grandes retrasos en la terminación de Medupi, tan necesaria para responder a las preocupaciones por el suministro de energía en el país; se esperaba que la primera energía de la central se suministrara a finales de año. La huelga comenzó en enero, cuando algunos trabajadores protestaron por el cálculo de sus bonificaciones de final de año. Los trabajadores también están descontentos por algunos de los términos del acuerdo laboral del proyecto.
Eskom respondió cerrando las instalaciones poco después de comenzar la huelga, con lo que se agravó la situación, pues otros se unieron a consecuencia del cierre, acción que fue impugnada en los tribunales por el National Union of Metalworkers of South Africa (Numsa). En la huelga ha habido algunas protestas violentas y varios trabajadores han sido detenidos.
Los sindicatos que organizan a los trabajadores en Medupi, entre ellos el National Union of Mineworkers (NUM) y el Numsa, llegaron a un acuerdo con los contratistas, mediante la intervención del ministro de Empresas Públicas, Malusi Gigaba. Eskom puso fin al cierre el 6 de marzo. Sin embargo, debido al incumplimiento de los términos del acuerdo, los trabajadores pararon de nuevo, días después de firmarse el acuerdo el 8 de marzo.
En el suministro de energía de Eskom hay una amenaza más inmediata, al tener que depender de las existencias de carbón como resultado de las huelgas sin protección en seis minas de carbón de uno de sus principales proveedores, Exxaro Resources. Más de 3.500 mineros de carbón han abandonado el trabajo, por no haber recibido sus primas, que normalmente se pagan en febrero, alegándose que no se han alcanzado los objetivos de producción.
El NUM apoya las demandas de los trabajadores en huelga en Exxaro, pues no conocen los objetivos de producción, y las primas no se han vinculado nunca en la compañía a objetivos en el pasado. Si la huelga no resuelve rápidamente, podrían resultar afectadas tres centrales que generan el 20 por ciento de la energía de Sudáfrica.