13 diciembre, 2012Tras una serie de movilizaciones y una reunión de dos días con los representantes del Gobierno, la central sindical nacional de Túnez, la UGTT, decidió desconvocar la huelga anunciada para el 13 de diciembre.
En respuesta a los violentos ataques a la UGTT, hubo una serie de acciones de protesta y huelgas como preludio de la huelga nacional anunciada por la UGTT para el 13 de diciembre.
Gracias a la presión nacional e internacional, el Gobierno aceptó una serie de reuniones para llegar a un compromiso con la UGTT, en un intento de evitar la huelga. Las partes se reunieron el 11 y el 12 de diciembre, y se consideró una de las principales demandas de la UGTT: la disolución de las ligas de protección de la revolución. A la UGTT le preocupa que esos cuerpos, instalados por el partido en el poder en todo el país, hayan actuado en los últimos meses bajo sus órdenes y, junto con la milicia, hayan atacado con plena impunidad a todos los que han presentado puntos de vista alternativos.
En la reunión, el Gobierno se comprometió a constituir en un mes una comisión conjunta para investigar los violentos ataques a la UGTT el 4 de diciembre. Sobre la base de los resultados de la investigación, se someterá un informe al Gobierno, y se adoptarán medidas de conformidad con la legislación tunecina.
El Gobierno admitió los ataques a la UGTT y acordó asumir sus responsabilidades a este respecto. Se iniciará un procedimiento judicial contra las personas y las partes que participaron en los ataques.
Tras las negociaciones con el Gobierno, la delegación de la UGTT presentó sus resultados a la junta ejecutiva del sindicato, en la que se tomó la decisión de desconvocar la huelga nacional. El 13 de diciembre se celebró una conferencia de prensa para anunciar oficialmente los resultados de las negociaciones y la decisión de no celebrar la huelga.