1 abril, 2025El 20 de marzo, se celebró un seminario en línea sobre el futuro del carbón, en medio de una compleja interacción de factores que incluyen la apertura de nuevas minas de carbón, innovaciones tecnológicas y dinámicas geopolíticas particulares en la minería carbonífera. Para los países del sur global, el carbón representa alrededor del 70 % de la capacidad de generación de energía. Los participantes del seminario afirmaron que Indonesia y Sudáfrica obtienen la mayor parte de su energía del carbón, mientras que Zimbabue lo utiliza en su matriz energética.
Según Glen Mpufane, director de minería de IndustriALL Global Union, las principales cuestiones que se plantean en los debates son: “¿Puede el carbón ser limpio? ¿Tiene futuro? Además, ¿cuál es el papel del carbón en la descarbonización y la Transición Justa?” Estas fueron las preguntas clave que debatieron los más de 30 participantes, procedentes de sindicatos afiliados a IndustriALL y organizaciones de apoyo a los trabajadores de países del sur global en Asia, América Latina y África Subsahariana. Los sindicatos hicieron hincapié en que una Transición Justa de la generación de energía a partir de combustibles fósiles con alto contenido de carbono a economías sostenibles, cuyas fuentes principales sean las energías renovables, debe priorizar los intereses de los trabajadores.
Mpufane afirmó que el futuro del carbón debería debatirse en el contexto de una Transición Justa para los mineros del carbón y considerando las dinámicas de poder en la transición energética. Dijo que, en la mayoría de los casos, el norte global ejerce presión sobre el sur para que reduzca sus emisiones de carbono y, al mismo tiempo, utiliza otros combustibles fósiles:
“Estados Unidos, Canadá y Australia, los autodenominados líderes climáticos, han emitido el 60 % de las nuevas licencias de petróleo y gas desde 2020”
, expresó.
Kemal Ozkan, secretario general adjunto de IndustriALL Global Union, declaró que una Transición Justa debe tener en cuenta la seguridad en el empleo, ya que la minería del carbón emplea a 7 millones de trabajadores en todo el mundo, de los cuales 2,5 millones están en el sur global. Argumentó que “una eliminación rápida del carbón conlleva el riesgo de una pérdida masiva de puestos de trabajo”. Los cierres de minas han tenido diversos costos sociales, que incluyen la pérdida de salarios, el colapso de comunidades y la destrucción de economías locales y regionales. Sin embargo, esto puede mitigarse mediante un plan de Transición Justa que proteja los intereses de los trabajadores, afirmó.
En el seminario en línea también se debatió cómo estaban respondiendo los sindicatos a los debates sobre el futuro del carbón. Igor Díaz dijo que el sustento de 80.000 personas en Colombia depende del carbón, pero que los anuncios de transición energética del Gobierno carecían de un plan concreto en materia laboral. En respuesta, los sindicatos propusieron subsidios para programas de reconversión profesional, inversión pública en investigación y desarrollo de carbón limpio, así como un plan de acción conjunto para políticas de transición inclusivas que protejan el bienestar de los trabajadores.
Martin Kaggwa, director del Instituto de Investigación Sam Tambani, afiliado al Sindicato Nacional de Mineros (NUM) en Sudáfrica, dijo que los sindicatos deben aprovechar el potencial de la tecnología para producir carbón limpio. Dio ejemplos de la tecnología de bucle químico directo del carbón (CDCL), un proceso que reduce las emisiones de carbono en un 40 % en comparación con la combustión tradicional. Afirmó que, si se aumenta la CDCL, hay posibilidades de que se pueda extender la vida económica del carbón. Esta tecnología se ajusta a los objetivos climáticos y ofrece oportunidades para concretar estrategias de transición para las economías dependientes del carbón en el sur global, explicó.
Una de las cuestiones planteadas en el seminario en línea es la protección de los derechos laborales en un contexto de recortes de gastos por parte de las empresas carboníferas. Busisiwe Matizerd, del NUM, afirmó que los sindicatos deben seguir luchando contra los recortes y las condiciones laborales precarias que varias de estas empresas imponen. Una de ellas es Seriti, que recientemente ha despedido a más de 1137 trabajadores en Sudáfrica.
En el seminario en línea se comentó que, en Indonesia, donde el carbón proporciona electricidad asequible y constituye el 60 % de la red eléctrica nacional, los sindicatos se resisten a la privatización de las empresas eléctricas públicas, ya que temen que la electricidad se encarezca para la clase trabajadora y los sectores más desfavorecidos.
Como forma de avanzar, las secretarías regionales de IndustriALL para América Latina y el Caribe, el Sudeste Asiático y África Subsahariana acordaron un plan de acción conjunto y respuestas coordinadas sobre la posición sindical entre países del sur sobre el futuro del carbón. Por su parte, los sindicatos acordaron documentar sus experiencias de transición locales, por ejemplo, las reformas estancadas de Colombia y las leyes laborales de Botsuana. También se coordinarán con grupos como Future Coal en cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza, y amplificarán las voces sindicales del sur global en lo que respecta a la urgencia de una Transición Justa para los mineros del carbón.
Foto: Mina de carbón en Etiopía, Flickr, Jasmine Halki