21 mayo, 2024Malasia se ha convertido en un polo de atracción para la inversión internacional en electrónica y semiconductores, y las exportaciones de productos eléctricos y electrónicos del país han experimentado un fuerte aumento del 54,2 %. Sin embargo, el incremento de la inversión en electrónica y semiconductores en Malasia contrasta fuertemente con la baja afiliación sindical: solo el 6 % de los trabajadores del país están sindicalizados, la mayoría en el sector público.
Según los informes, Intel construirá una nueva planta de ensamblaje de chips, valorada en 7 mil millones de dólares, y tiene una planta de empaque de chips tridimensionales en proceso. Infineon construirá la mayor planta de componentes eléctricos de carburo de silicio de 200 mm en Malasia. Texas Instruments está expandiendo sus actividades con dos nuevas plantas de ensamblaje y pruebas. Jabil, Bosch, Micron, Western Digital, Alton, Indium, AT&S y ATX ampliarán sus operaciones o construirán nuevas fábricas en Malasia.
No obstante, este auge en la industria deja poco espacio para los derechos de los trabajadores. Los sindicatos del sector electrónico se prohibieron en la década de 1970. Sin embargo, gracias a la presión internacional, el gobierno aprobó los sindicatos de empresa a fines de la década de 1980.
En 2009, se permitió la creación de sindicatos regionales en el sector electrónico. En los años siguientes se formaron los Sindicatos de Trabajadores de la Industria Electrónica (EIEU) de las regiones oeste, sur, norte y este del país. Estos cuatro sindicatos están afiliados a IndustriALL como la Coalición EIEU.
La Coalición EIEU representa a alrededor de 13.000 trabajadores de la electrónica en una veintena de empresas, alrededor del 2,8 % de la mano de obra total de la electrónica. Se estima que el sector electrónico en Malasia emplea a 471.800 personas.
Desde su creación, la Coalición EIEU se ha enfrentado a la represión sindical. En 2011, el presidente de la región oeste del EIEU, Wan Noorulazhar bin Mohd Hanafiah, fue destituido tras la creación del sindicato. El gobierno de Malasia está investigando una denuncia presentada por dicha región del EIEU sobre violaciones de los derechos de los trabajadores.
Hace dos años, los trabajadores de Molex fueron víctima de intimidación durante una votación sindical secreta. El Departamento de Relaciones Laborales inició una investigación y suspendió las elecciones. La región norte del EIEU presentó una grabación en la que se escuchaban las amenazas de la dirección, pero desde entonces se ha negado a comparecer ante el Departamento por miedo a exponer a los sindicalistas a una mayor intimidación. La causa judicial sigue pendiente.
En una votación secreta reciente en Texas Instruments Malaysia, la dirección cambió los horarios de los turnos, organizó algunas “comidas de agradecimiento” para los trabajadores el día de la votación y desplegó al equipo directivo y a los guardias de seguridad en lugares visibles para intimidar al personal.
Bruno Periera, el pionero de la sindicalización en el sector electrónico y secretario general de la región oeste del EIEU, afirma que durante 50 años el gobierno de Malasia ha utilizado esta presencia sindical débil para atraer inversiones extranjeras a la industria.
“La negativa a la creación de un sindicato nacional de electrónica, una fórmula injusta de votación secreta que cuenta los votos de los ausentes en contra de los sindicatos, la escasa aplicación de la Ley de Relaciones Laborales, que prohíbe la represión sindical por parte de la autoridad, y la intimidación generalizada de los trabajadores locales y migrantes durante el proceso de sindicalización, son factores que contribuyen a la escasa sindicalización y cobertura de la negociación colectiva en el sector electrónico de Malasia”,
expresó Periera.
Un rayo de esperanza para el movimiento sindical malasio es que la modificación de la Ley de Sindicatos, que permite la organización intersectorial y la competencia democrática entre sindicatos, creará un entorno propicio para la sindicalización en el sector electrónico.
La Coalición para la Reforma de la Legislación Laboral (LLRC), una coalición de 58 sindicatos y ONG liderada por afiliados de IndustriALL en Malasia, aboga continuamente por mejores leyes y regulaciones de protección de los trabajadores para facilitar la sindicalización.
El secretario general de la coalición y miembro del Comité Ejecutivo de IndustriALL, Gopal Kishnam Nadesan, está pidiendo al gobierno que la fórmula del voto secreto sea la misma que la de las elecciones generales: los sindicatos que obtengan más votos en las urnas deben obtener el reconocimiento.
Los afiliados de IndustriALL en Malasia suelen presentar denuncias por represión sindical ante el Departamento de Relaciones Laborales, exigiendo que se tomen medidas contra los empleadores. Los dirigentes sindicales de este país se reúnen periódicamente para intercambiar estrategias de sindicalización y campaña. Los sindicatos están incrementando la cooperación con las ONG de trabajadores migrantes para atender sus necesidades y gestionar sus reclamos.
El director del sector eléctrico y electrónico de IndustriALL, Alexander Ivanou, declaró:
“El auge de la industria electrónica en Malasia debe acogerse con satisfacción, ya que crea más puestos de trabajo. Sin embargo, IndustriALL insta a las multinacionales a que respeten los derechos de los trabajadores, en particular la libertad sindical, cuando creen o amplíen sus instalaciones de fabricación. Los esfuerzos de las empresas para mitigar los riesgos financieros, operativos, jurídicos, geopolíticos y de otro tipo no deben hacerse a expensas de los derechos fundamentales de los trabajadores y de una vida digna”.