22 enero, 2014Los trabajadores y sus familias necesitan un cambio urgente en las políticas que aplican los líderes mundiales: piden que se invierta en puestos de trabajo, salario mínimo con el cual la gente pueda vivir, y protección social.
Una encuesta mundial en que participaron 13 países, realizada por la Confederación Sindical Internacional (CSI), encontró que un 87 por ciento de las personas señala que sus sueldos se ven estancados o no aumentan en comparación con el alto costo de la vida. Uno de cada ocho encuestados dijo que enfrenta graves problemas económicos, y que ya no se puede sufragar los gastos básicos de la vida. Según la CSI, los pronósticos financieros indican estancamiento - no recuperación - con casi 200 millones de personas desempleadas.
Sharan Burrow, Secretaria General de la Confederación Sindical Internacional, advirtió: “En una economía mundial estancada, es con la inversión que se logrará impulsar el empleo y la demanda. No podemos suponer que el crecimiento por sí solo vaya a crear puestos de trabajo. Si no aumentan los sueldos, la economía mundial no podrá recuperarse en base al crecimiento basado en las exportaciones. Es imprescindible contar con un aumento de la demanda - en particular de las familias que trabajan".
En el año recién pasado aumentó la desigualdad y la brecha, cada vez mayor, entre los líderes gubernamentales y los ciudadanos. De las personas que participaron en esta encuesta mundial que realizara la CSI en 13 países, solamente un 13% considera que los gobiernos están actuando en su favor. Un 28% por ciento de la gente está desencantada, o peor: aislada y sin compromiso social, puesto que creen que los gobiernos no actúan en favor de la gente ni de los negocios.
Al comentar sobre este informe, Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL Global Union, dijo lo siguiente:
La desigualdad es un gran obstáculo para el proceso de recuperación económica; los sueldos miserables afectan de manera desastrosa a los trabajadores. En todo el mundo, hay demasiados países e industrias donde no se les paga a los trabajadores un salario digno que pueda cubrir las necesidades fundamentales de la vida. Éste es un hecho bien conocido, y ya es hora de que los gobiernos y los empleadores asuman su responsabilidad en esta situación.
El plan Davos 2014 que proponen los dirigentes sindicales para la inversión y el empleo, sueldos, y protección social, incluye lo siguiente:
- Inversiones específicas en infraestructura con el fin de mejorar el potencial productivo a largo plazo, para que se pueda avanzar hacia una economía de bajas emisiones de carbono;
- Reducir la desigualdad y reforzar la negociación colectiva y los sueldos mínimos, con el fin de aumentar el poder adquisitivo de las familias con bajos y medianos ingresos;
- Invertir en políticas activas en favor del mercado laboral, para aumentar el nivel de capacitación y reducir el desempleo de los jóvenes; y
- Reducir el empleo informal y crear trabajo decente en los países emergentes y en vías de desarrollo.