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5 febrero, 2013Los electricistas seguirán luchando y resistiéndose en la defensa de sus derechos. Informaron que acudirán a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para denunciar las violaciones a las leyes mexicanas.
La Suprema Corte de Justicia de la Nación Mexicana (SCJN) emitió una sentencia que revoca el amparo que el tribunal laboral había otorgado a los trabajadores electricistas mexicanos ordenando su restitución en la Comisión Federal de Electricidad.
Los ministros, ratificaron la validez del decreto emitido en octubre de 2009 por el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa, que ordenó la extinción de la compañía Luz y Fuerza del Centro (LyFC).
El Sindicato Mexicano de Electricistas, SME, realizó un mitin informativo afuera de la SCJN, calificando la actitud de la corte como deshonesta. El líder electricista Martin Esparza Flores convocó a los trabajadores en resistencia a mantener firme la convicción de defender al SME y nuestro derecho constitucional al trabajo digno: ¡nadie se va hasta alcanzar la victoria!
Explicó que el sindicato acudirá a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para denunciar las violaciones a las leyes mexicanas y tratados internacionales en perjuicio de la clase trabajadora.
El 29 de enero, la representación del Sindicato Mexicano de Electricistas entregó a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación un “amicus curiae” (opinión jurídica de terceros ajenos al juicio) para solicitar que se respete el amparo que ordena la reinstalación de los trabajadores en resistencia en la Comisión Federal de Electricidad. Este recurso jurídico fue acompañado por pronunciamientos de diversas organizaciones solidarias con la lucha del sindicato, dirigidos a los ministros, los cuales de publicaron en periódicos de circulación nacional.
Posteriormente el 31 de enero realizaron una marcha en defensa de la soberanía energética y alimentaria.
IndustriALL Global Union envió una carta a los compañeros del SME, en la cual entrega su apoyo y solidaridad a los compañeros del SME y reiterando una vez más que el gobierno respeten las leyes laborales y sindicales en México.