7 octubre, 2020Después de luchar por las enmiendas al código de trabajo, la campaña de los sindicatos georgianos dio resultados el 29 de septiembre, cuando el Parlamento votó a favor de mejoras relacionadas con las inspecciones de trabajo, el tiempo de descanso obligatorio y la lucha contra la discriminación.
El Acuerdo de Asociación UE-Georgia de 2014 introdujo un régimen comercial preferencial para Georgia y estableció una lista de prioridades para garantizar el respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales. Entre ellas se incluye adecuar el Código del Trabajo a las normas de la OIT así como también definir funciones de supervisión de las inspecciones de trabajo y eliminar las restricciones existentes a las responsabilidades de los inspectores.
El parlamento de Georgia ha aprobado una serie de enmiendas a la legislación laboral, la principal de las cuales hace cambios en cuanto a la ampliación de las atribuciones de la inspección de trabajo.
Hasta ahora, las inspecciones de trabajo sólo comprobaban violaciones de seguridad en el trabajo y era necesario que dieran una advertencia previa o una orden judicial para tener acceso.
Ese requisito se elimina con los cambios. Las inspecciones de trabajo supervisarán todos los derechos laborales en Georgia, identificarán violaciones, advertirán y multarán a los empleadores o en algunos casos suspenderán temporalmente los lugares de trabajo por derechos laborales mal implementados, y entrará en vigor el 1.° de enero de 2021.
Otras enmiendas aprobadas al Código de Trabajo incluyen nuevas disposiciones sobre la igualdad de género y la lucha contra la discriminación, el tiempo de descanso diario y semanal obligatorio, una mejor protección para los pasantes, los trabajadores a tiempo parcial, las mujeres embarazadas y las madres recientes.
Tamaz Dolaberidze, presidente del Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos, Mineros y de la Industria Química de Georgia, expresó:
“Las enmiendas definen el concepto de transferencia de una empresa a un nuevo propietario y prohíben la restricción de los derechos de los trabajadores durante dicha transferencia; todos los contratos de trabajo conservan su validez y un convenio colectivo permanecerá en vigor durante al menos un año”.
A pesar de muchas enmiendas positivas que mejorarán los derechos laborales en Georgia, algunas de las propuestas de los sindicatos fueron eliminadas tras la presión de las empresas, como la propuesta de fijar una tarifa de horas extras en 125 porciento y el derecho de los trabajadores a realizar huelgas para solidarizarse con trabajadores de otras empresas. La ley todavía no define el concepto y la cantidad de un salario mínimo.
Amiran Zenaishvili, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Energía de Georgia, señaló:
“Las enmiendas ofrecen una oportunidad para que un menor de 14 años trabaje, pero no se ha fijado la cantidad de horas de trabajo. Existe una falta de motivos claros para la terminación del empleo, ya que el código de trabajo tiene en su redacción “por otra circunstancia objetiva”.
El secretario general adjunto de IndustriALL, Kemal Özkan, expresó:
“IndustriALL celebra las enmiendas positivas a la ley de trabajo georgiana y felicita a los sindicatos y los trabajadores por este logro. Es importante asegurar que los cambios se lleven a la práctica y que continúe el trabajo para otras mejoras, incluido un salario mínimo, para adecuar los derechos de los trabajadores de Georgia a las normas básicas de la OIT”.