8 noviembre, 2016La vigésimo segunda Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP22) se inauguró el 7 de noviembre en Marrakesh (Marruecos).
La COP21, celebrada en París, produjo el Acuerdo de París, un histórico tratado para controlar las emisiones de gases de efecto invernadero con el fin de limitar el calentamiento global a 2 grados centígrados (1,5 si es posible). El Acuerdo de París entró en vigor el 4 de noviembre, al haberlo ratificado formalmente más de 100 naciones. Por lo tanto, en la COP22 se negociarán los detalles de la aplicación del Acuerdo. Existe la sensación de que algunos gobiernos se han sorprendido de la rapidez con que ha entrado en vigor el Acuerdo de París.
Hay razones para el optimismo, pues algunos países están realizando grandes proyectos de energías renovables. Sin embargo, es muy probable que 2016 sea el año más caluroso a nivel mundial, desde que existen registros, y las emisiones de gases de efecto invernadero siguen una tendencia que, de no modificarse rápidamente, supondrán un calentamiento global de 3 a 4 grados centígrados, en lugar de la gama segura y convenida de 1,5 a 2,9 grados. Para alcanzar estos objetivos se requerirá una escala masiva de inversiones y la aplicación de nuevas tecnologías sin precedentes; sin embargo, sólo se ha alcanzado parcialmente la cifra de 100.000 millones $ del Fondo Verde para el Clima.
Hasta ahora únicamente algunos países han entablado serios debates sobre medidas de transición justa.
Durante las dos próximas semanas, los sindicatos coordinarán nuestra presencia en las diversas reuniones de negociación y acontecimientos paralelos par dar a conocer nuestras opiniones y seguir los progresos.
Continuemos sintonizados.