12 diciembre, 2015Desde la inauguración de esta importantísima cumbre sobre cambio climático, Brian Kohler, Director de Sostenibilidad de IndustriALL Global Union, está informando, día a día, por medio de nuestro blog, sobre aspectos significativos de las sesiones que se realizan en París:
Día 14 – Sábado, 12 de diciembre
Hoy se publicó la versión definitiva de la Decisión y Acuerdo de París. Aunque inicialmente me sentí decepcionado por no haberse alcanzado todo lo que esperábamos los del movimiento sindical, sin embargo, después de haber reflexionado, me siento más conforme con el texto alcanzado. ¿Qué debo decir de un acuerdo que es débil e imperfecto en varios aspectos, pero que es lo mejor que podría lograrse políticamente en este momento, y que, no obstante esto, puede constituir un punto decisivo para nuestra civilización y el planeta en que vivimos?
Hay que tener cuidado en cuanto a lo que se lea y se crea acerca de este complejo documento. Por cierto hay quienes irán corriendo a hacer un análisis rápido del Acuerdo de París, con o sin leerlo y entenderlo. Hay quienes se apresurarán a declarar que no sirve, sea cual sea su contenido. Y hay quienes correrán para celebrarlo, sea cual sea su contenido.
Este Acuerdo merece algo mejor - potencialmente, al menos, constituye una última oportunidad para salvar la civilización de los impactos del cambio climático. Merece cuidadosa reflexión y análisis sobre sus aspectos positivos, debilidades y probables impactos. Voy a leerlo y releerlo una y otra vez, para luego presentar mi análisis en este blog. ¡Manténganse al tanto!
Día 13 – Viernes, 11 de diciembre
Hoy ha sido un día de observación y espera. Continuaron intensas negociaciones sobre aquellos obstáculos que siguen impidiendo establecer el Acuerdo de París. Se organizaron actos para reforzar la opinión de la sociedad civil, que considera que los derechos humanos, derechos laborales, y la Transición Justa deberían estar en la parte principal del texto, y no sólo en el preámbulo. (Ver el vídeo al respecto)
Se espera que la versión "final" se publique mañana por la mañana (sábado 12 de diciembre). Voy a publicar mi análisis de la misma en este blog. ¡Manténganse al tanto!
Día 12 – Jueves, 10 de diciembre
A última hora de la noche del día jueves, después de denodados esfuerzos durante largas horas de negociación, se dio a conocer una versión casi final de la Decisión y el Acuerdo, aunque todavía hay áreas de debate. Ante esto, se podría decir que me siento decepcionado, pero no completamente desesperanzado. Me siento decepcionado, porque donde había varias opciones en las versiones anteriores, las que más frecuentemente se han seleccionado han sido las menos ambiciosas. No estoy completamente desesperanzado, porque el proyecto de Acuerdo de París tiene varios elementos positivos.
Sea cual sea el resultado de las conversaciones de París, será un comienzo y no un punto final. IndustriALL debe estar listo para encabezar la vía a seguir.
Antes de intentar un análisis inicial de lo que es bueno, malo y feo en el Acuerdo de París, quisiera recordar al lector que el Acuerdo de París tiene una estructura muy diferente de la del Acuerdo de Kioto que viene a reemplazar. El Protocolo de Kioto era un sistema “de arriba hacia abajo” que imponía determinadas metas en cuanto a emisiones, e incluía sistemas para su verificación. Sin embargo, los países desarrollados lo consideraron injusto y muchos simplemente no cumplieron con sus objetivos o lo rechazaron en su totalidad, sin sanciones de ningún tipo. En cambio, el Acuerdo de París es una especie de sistema “de abajo hacia arriba” que alienta a los países a establecer sus propios objetivos e integrar esos objetivos en su propia legislación. Incluso si algunos países no establecieran esos objetivos como un compromiso legislativo, de todas maneras hace que el enfoque de París sea políticamente más factible.
Aunque el Acuerdo es un documento legal, en términos prácticos será difícil o imposible aplicarlo sin voluntad política de las Partes para que sea eficaz. En mi opinión la implementación del documento se logrará principalmente a través de presión política, y de vez en cuando con demandas legales de la sociedad civil. El texto del Acuerdo sin duda ofrece una oportunidad para que las Partes hagan lo correcto; sin embargo hay muy poco en términos de sanciones contra aquellas Partes que no lo cumplen.
Recordemos las tres principales reivindicaciones del movimiento sindical al iniciar estas conversaciones: (1) Aspirar a metas superiores, aprovechando todo el potencial de creación de empleo que conlleva la acción por el clima; (2) cumplir con el financiamiento climático y el apoyo para los más vulnerables; y (3) comprometerse a procurar una Transición Justa para los trabajadores y sus comunidades.
En pos de estos tres objetivos, seguimos presionando para que se coloquen en una parte más destacada del texto los conceptos de Transición Justa, derechos humanos, metas superiores, un mecanismo financiero claro y medición más clara, notificación y verificación de las Contribuciones Determinadas y Previstas a Nivel Nacional (INDC por sus siglas en inglés), sin embargo, se está cerrando el plazo para obtener cambios de última hora.
Los interesados pueden leer aquí la versión actual del proyecto de Acuerdo: http://unfccc.int/resource/docs/2015/cop21/eng/da02.pdf
Estampo aquí mis observaciones sobre el proyecto de Acuerdo, tal como existe en este momento (recordemos que las negociaciones están todavía en curso):
El Acuerdo de París y el proceso posterior
• El Acuerdo de París, desde el punto de vista político, quizá sea el mejor que se pueda haber logrado en este momento. La presidencia francesa ha trabajado duro y eficazmente, para evitar una catástrofe como la que se vio en la COP15 de Copenhague. Como documento político, establece un proceso: no sólo crea un marco institucional basado en las negociaciones internacionales, que ha sido puesto en cuestión desde que empezara a morir lentamente el Protocolo de Kioto; también establece un tono para un camino positivo hacia adelante. De hecho, las señales que envía a los gobiernos y a los inversores quizá sea su logro más importante. El marco del Acuerdo es flexible y tiene aplicabilidad universal, aunque se trata de un buque sin carga con respecto a muchos detalles específicos que quisiéramos.
Objetivos
• Los objetivos que se quiere alcanzar (Artículo 2) son: “(a) Contener el incremento de la temperatura global promedio en mucho menos que 2°C por encima de los niveles pre-industriales y seguir esfuerzos para limitar el incremento de la temperatura a 1,5°C por encima de los niveles pre-industriales, reconociendo que con este esfuerzo se reducirían significativamente los riesgos e impactos del cambio climático; (b) Aumentar la capacidad de adaptación a los efectos adversos del cambio climático, promoviendo resistencia al clima y desarrollando bajas emisiones de gases de efecto invernadero, de modo que no comprometa la producción de alimentos; (c) Elevar el flujo financiero a un nivel compatible con una trayectoria que pueda conducir a un desarrollo resistente al clima y con bajas emisiones de gases de efecto invernadero.” Todos estos objetivos están bien, pero los mecanismos que se establecen para alcanzarlos son tan débiles que al final resultan ser, más que nada, aspiraciones. Especialmente preocupante es la falta de mecanismos claramente definidos para medir, reportar y verificar las Contribuciones Determinadas y Previstas a Nivel Nacional (INDC por sus siglas en inglés).
Transición Justa
• Se menciona la Transición Justa en el Acuerdo, aunque no en el mejor lugar: está en el preámbulo del texto final. Sin embargo, el texto es claro y conciso; en algunos aspectos está mejor que las formulaciones anteriores: (párrafo 10) “Teniendo en cuenta los imperativos de una transición justa de la fuerza laboral y de la creación de empleos dignos y de trabajos de calidad, de conformidad con las prioridades de desarrollo definidas a nivel nacional.” Otros tópicos relacionados con los derechos humanos se encuentran también en el preámbulo. Nuestra gran preferencia hubiera sido que estas referencias estuvieran en el texto principal del Acuerdo (que se hubiesen colocado, por ejemplo, en el artículo 2) en lugar de estar en el preámbulo. Sin embargo, es muy importante que se haya logrado incluir estas palabras en el Acuerdo: después de la COP de Lima no había ninguna garantía de que esas palabras siquiera figuraran en alguna parte del Acuerdo. Estén en el preámbulo o en el texto principal del Acuerdo, creo que nuestra tarea será la misma: cabildear y hacer campañas para que nuestros gobiernos nacionales reconozcan que en la COP21 han adquirido un compromiso político ante su fuerza de trabajo; debemos presionar para que cumplan con ese compromiso.
Financiación
• Las opciones están aún sobre la mesa. Se ha acordado un mínimo de US$100 mil millones por año, lo cual es satisfactorio, pero sigue el debate sobre quiénes deben aportar a ese fondo, y cuánto deben abonar. En este momento, ésta es quizás la parte del Acuerdo que es más difícil de resolver. Es en gran parte esta área la que sigue siendo un factor donde pesa la realización del principio de "responsabilidad común pero diferenciada", que es un requisito de la CMNUCC.
Revisión
• Habrá un ciclo de revisión de 5 años, pero una primera valoración (que se describe como un "diálogo facilitado") se llevará a cabo en 2019. ¡No está claro cómo un diálogo facilitado cerrará la brecha entre las INDC y las necesidades reales!
Pérdidas y daños
• En varias COP, ha sido tema de debate la cuestión de si se debe reconocer que habrá pérdidas y daños a consecuencia del cambio climático, objetado por los países desarrollados que parecen creer que la aceptación de pérdidas y daños va a crear expectativas de responsabilidad e indemnización. Esto no es realmente el caso, pero siguen los planteamientos destinados a debilitar estas referencias. De hecho, en el texto no se menciona ningún mecanismo para entregar nada a los países que puedan sufrir pérdidas o daños por el cambio climático.
Día 11 – Miércoles 9 de diciembre
Sigo creyendo con optimismo que probablemente se logre un acuerdo factible en la COP21, sin embargo al aproximarse el fin de la Conferencia, la versión preliminar del texto sigue siendo débil en muchas partes. Todavía hay grandes segmentos del texto entre paréntesis y párrafos alternativos que se presentan como opciones. La diferencia entre un Acuerdo de París bastante sólido y un Acuerdo inaceptable por su debilidad radica en las decisiones que se tomen en cuanto a lo que hay que incluir, y lo que requiere modificación.
En la versión preliminar del Acuerdo de París, una de las áreas clave en la que todavía hay diferencias de opinión es si se debe incluir u omitir texto sobre los derechos humanos, derechos de la mujer, y derechos de los pueblos indígenas. El 10 de diciembre es el Día Internacional de los Derechos Humanos que conmemora el día en que, en 1948, coincidentemente en París, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Los negociadores de las partes de la COP21 deberían darse cuenta de lo simbólico que es esta coincidencia. Es simplemente indefendible producir un acuerdo sobre el cambio climático en el día de hoy, en esta ciudad, que no hable de los derechos humanos.
El objetivo global, o el nivel en que se quiere establecer la meta, es aún tema de debate. Las Contribuciones Determinadas y Previstas a Nivel Nacional (INDC por sus siglas en inglés), compromisos ya asumidos por las Partes, no son suficientes para garantizar que el calentamiento global se mantenga en menos de 3 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales. Por lo tanto, puede parecer un poco esotérico debatir si el objetivo debe ser de 2 grados o 1,5 grados. Hay buenas razones científicamente justificadas para establecer el objetivo en 1,5 grados si se quiere limitar los riesgos, por ejemplo para las personas que viven en países insulares de poca altura en zonas propensas a inundaciones. Sin embargo, entiendo que ya es seguro que vamos a sobrepasar los 1,5 grados, pero todavía hay una posibilidad técnica de limitar el calentamiento global para que no supere los 2.0 grados. Por lo tanto, sería más que nada un gesto simbólico establecer la meta en 1,5 grados. Un problema relacionado que no se ha resuelto es la diferenciación: el nivel de las expectativas de los países desarrollados en comparación con los que están en vías de desarrollo.
Esto me lleva a la siguiente conclusión que es relativa a la financiación. Sea cual sea el objetivo que finalmente se establezca, sólo se puede realizar si se ofrece financiación adecuada a los países que más la necesitan. El texto tiene que resolver la cuestión de financiación fiable basada en un nivel mínimo de US$100 mil millones por año.
Es necesario revisar periódicamente los compromisos de cada país con el fin de hacer un seguimiento del progreso hacia la seguridad climática. Aunque se apruebe un ciclo de revisión cada 5 años, no se puede esperar hasta 2020 para que se lleve a cabo la primera revisión de este tipo.
Sectores no cubiertos por el Acuerdo de París incluyen las emisiones atribuidas al tráfico aéreo y marítimo. Los organismos de la ONU responsables de estos sectores deben señalar públicamente qué es lo que piensan hacer, para mantener políticas coherentes dentro del sistema de organizaciones de las Naciones Unidas.
Se calcula que aproximadamente 22,5 millones de personas se ven obligadas a abandonar sus hogares cada año desde 2008. En los últimos dos días de estas negociaciones, el panorama que se vislumbra de millones de refugiados climáticos debería incentivar a los países desarrollados para que tomen medidas concretas.
El concepto de la Transición Justa está en el preámbulo del Acuerdo. No es el lugar ideal, pero algo es algo. Se habría eliminado completamente del texto si no fuera por la intensa presión ejercida por los delegados sindicales. Sea estampando esta referencia en el preámbulo o en el texto principal, nuestra labor será la misma: tendremos que movilizarnos, haciendo campañas para exigir que los gobiernos cumplan con su compromiso político de realizar una Transición Justa, y que esa Transición se aplique en la realidad para los sindicalistas afectados, sus familias y las comunidades que dependen de ellos.
Día 10 - Martes 8 de diciembre
Hoy continuaron las reuniones de alto nivel. Es difícil seguir la pista a tantos subgrupos, y otra complicación es el mar de letras de las siglas de cada uno de ellos. Una innovación introducida por el Presidente francés de la COP21, Laurent Fabius, es la creación de un grupo denominado el Comité de París, que permite que los diferentes grupos de trabajo le informen a él directamente sobre su progreso. Fabius señala que espera que este sistema aporte algo de orden y coherencia a los debates. De hecho, esta medida parece haber tenido un efecto positivo, en comparación con las COP anteriores.
Los principales obstáculos que impiden un acuerdo en este momento parecen ser los siguientes:
- Diferenciación: es decir, la forma de abordar el requisito de la CMNUCC que “Las Partes deberían proteger el sistema climático en beneficio de las generaciones presentes y futuras, sobre la base de la equidad y de conformidad con sus responsabilidades comunes pero diferenciadas y sus respectivas capacidades. En consecuencia, las Partes que son países desarrollados deberían tomar la iniciativa en la lucha contra el cambio climático y sus efectos adversos”.
- Sigue siendo un punto de debate la proposición de fijar la meta en 1,5 grados centígrados en lugar de 2 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales. Me sorprende un poco que esto siga siendo un punto de debate. Creo que podría ser una estrategia engañosa: algunos países están dispuestos a suscribir la vía de los 1.5 grados, en forma estrictamente voluntaria, en lugar de la otra vía, que promete alcanzar los 2 grados como meta de cumplimiento legalmente vinculante. Al final, creo que el objetivo adoptado será el de "menos de 2 grados centígrados" por encima de los niveles preindustriales, pero hay más apoyo de lo que se había previsto para los 1,5 grados.
- No es de extrañar que sigan siendo cuestiones polémicas los mecanismos financieros y de contabilidad. Algunos países aseguran que no van a participar a menos que se amplíe la base de financiación.
- Otro obstáculo es la frecuencia y la naturaleza del período de revisión de las Contribuciones Determinadas y Previstas a Nivel Nacional (INDC por sus siglas en inglés).
- Transferencia tecnológica y asistencia técnica para los países en vías de desarrollo.
- Los grupos de presión empresariales manifiestan preocupación por el costo del carbón, evaluación de riesgos y seguros.
Ahora se han separado los derechos humanos y la Transición Justa, trasladándolos del texto principal al preámbulo. Seguimos presionando al máximo para que la Transición Justa se vuelva a colocar en el Artículo 2. Sin embargo, es poco probable que suceda. Es decir, para mayor claridad, es mejor tener nuestro texto en el preámbulo, evitando de este modo que se elimine completamente. Independientemente de si la Transición Justa vuelve a estamparse en el Artículo 2, o permanece en el preámbulo, nuestra labor después de la COP21 será la misma: procurar que los gobiernos cumplan con este principio. Hoy solicité se realizara una reunión sobre la estrategia a seguir para comenzar a intercambiar ideas de cómo el grupo sindical responderá a este resultado probable, pero debido a que todavía no disponemos del documento final para responder, el debate fue muy provisional. La forma de nuestra respuesta al probable Acuerdo de París afectará nuestra credibilidad y nuestra capacidad de trabajar con los gobiernos nacionales sobre la aplicación del Acuerdo.
Guy Rider de la OIT se reunió hoy con el grupo de delegados sindicales para estudiar el documento de orientación de la OIT sobre la Transición Justa, además de otros asuntos relacionados con el comercio, el desarrollo, los derechos humanos y el trabajo decente.
Se cree que mañana por la tarde se dará a conocer la versión revisada del proyecto de acuerdo. El trabajo continúa.
Día 9 – Lunes 7 de diciembre
Segunda semana: el denominado “segmento de alto nivel” de la COP21 ha comenzado hoy. Al sustituir ahora los ministros gubernamentales a su personal en las negociaciones, sigue habiendo una amplia serie de posibles resultados finales, desde muy malos hasta muy buenos. Aunque el proyecto abarca muchas esferas, numerosas cláusulas cruciales continúan entre corchetes (lo que indica que son facultativas o que se pueden suprimir).
Algunos aspectos sobresalientes son:
- en el proyecto de texto se establece un ciclo de revisión de 5 años, pero no está claro qué criterios deberán examinarse;
- creación de un fondo del clima de 100.000 millones $ USD (anuales) para 2020, pero los compromisos concretos de los países donantes respecto al fondo son muy inferiores a esa cifra. Tampoco se han fijado aún las reglas que regirán el uso del fondo;
- el establecimiento del objetivo de controlar el calentamiento global medio en menos de 2 grados Celsius o 1,5 grados Celsius (abogado por países en desarrollo y Estados insulares de baja altitud) sigue siendo uno de los puntos de discusión.
Para los sindicatos y otros grupos de la sociedad civil, una cuestión fundamental es la suerte del Artículo 2, que trata de los derechos humanos, los derechos de género, los pueblos indígenas y las Transición justa. En el proyecto más reciente se ha desmantelado este párrafo, trasladando algunos de los puntos a los párrafos 11, 12 y 13 del preámbulo. Sin embargo, se hace referencia en un anexo a que algunas Partes (entre ellas Canadá y Argentina) han pedido que todos esos derechos se reincorporen al Artículo 2, y no se conoce ninguna Parte que se oponga a ello. Esto deja una posibilidad de procedimiento a la presidencia francesa de reincorporar la Transición justa en el Artículo 2, pero esto sólo sucedería si hubiera una presión muy fuerte y bastante suerte.
Los sindicatos y otros grupos de la sociedad civil celebran pequeñas manifestaciones en el interior de la COP (lo cual raramente sucede con tantas medidas de seguridad) para expresar su indignación por la supresión de sus derechos de la parte dispositiva del proyecto de acuerdo (foto adjunta).
El secretario de energía de Estados Unidos, Ernest Moniz, se dirigió al grupo sindical sobre las cuestiones energéticas. Estados Unidos adopta un enfoque de “todas las cláusulas anteriores” sobre la energía, incluida la nuclear y los combustibles fósiles, pero también las energías renovables. Se mostró evasivo sobre la pregunta relativa a la captura y el secuestro de carbono, diciendo que a su juicio tienen una función que desempeñar, pero evitando afirmar que se haría a gran escala en las centrales térmicas de carbón.
Jeremy Corbyn y Naomi Klein protagonizaron otro acto celebrado esta tarde.
Día 8 - Domingo 6 de diciembre
Hoy no se realizaron negociaciones formales, aunque sí se llevaron a cabo algunas reuniones laterales y conversaciones informales. El trabajo real se reanudará mañana.
Éste fue el segundo día de un evento sindical especial sobre transición justa que fue celebrado en la Cumbre de los Pueblos, en el que hubo varios e interesantes oradores importantes.
Sería imposible tratar de resumir el gran número de presentaciones y debates que se registraron en esa ocasión.
Sin embargo, un tema que surgió fue el siguiente: que no será fácil convencer a quienes tienen riqueza y poder para que lo compartan con los demás. Si queremos una Transición Justa para un futuro sostenible, tendremos que exigirla, movilizarnos, luchar para conseguirla. Eso significa adoptar una posición futura más radical de lo que hasta ahora habíamos querido reconocer.
Día 7 – Sábado 5 de diciembre
En la última versión del proyecto de acuerdo, a partir de las 15:00 h aproximadamente, la frase "teniendo en cuenta los imperativos de una transición justa de la fuerza laboral y la creación de puestos de trabajo decente y de buena calidad, de acuerdo con las prioridades de desarrollo definidas a nivel nacional" se ha trasladado al preámbulo, y ya no aparece en el Artículo 2, en la parte operativa del texto.
Sin embargo, se ha tomado nota de que por lo menos algunas de las Partes han pedido que ese texto se vuelva a colocar en el lugar original, lo cual indica que esta posibilidad no se ha rechazado definitivamente todavía. La Presidencia francesa tendrá un margen de discreción para introducirlo de nuevo si hay presión suficiente para hacerlo.
Esto es, por supuesto, un resultado decepcionante de nuestra semana de cabildeo, pero no es del todo sorprendente. Significa que debemos hacer todo lo posible para convencer a las partes de alto nivel que se reunirán la próxima semana que no se debe dejar atrás a los trabajadores ni relegarlos a sólo un comentario en el preámbulo.
La opinión de Anabella Rosemberg de la CSI respecto a lo que ha sucedido se puede ver aquí:
Inglés: https://www.facebook.com/anabella.rosemberg/videos/10207761914063175/
Castellano: https://www.facebook.com/anabella.rosemberg/videos/10207761919863320/
Francés: https://www.facebook.com/anabella.rosemberg/videos/10207761923263405/
Fuera de las instalaciones de la cumbre del COP21, los sindicatos realizaron un evento especial sobre la Transición Justa, donde se llevó a cabo un debate franco, alegre, y a veces emocional. Me ha impresionado cómo la idea de una Transición Justa tiene ya buena aceptación y comprensión por parte de todo el movimiento sindical, realizándose en todas partes debates profundos y complejos sobre sus implicaciones y aplicación.
Día 6 - Viernes 4 de diciembre
Continuaron hoy los debates sobre toda la gama de temas que implica el proyecto de Acuerdo. A pesar del optimismo al comenzar la semana, gran parte de los debates se ha deteriorado, llegando a no ser más que disputas sobre procedimiento. Lamentablemente, una vez más, los debates de mayor interés para nosotros se llevaron a cabo a puerta cerrada. Aunque me estoy centrando en párrafos que son de mayor importancia para los sindicatos y la sociedad civil en general, aquéllos que denomino como párrafos sobre "Transición Justa", es importante que el lector comprenda que desde el punto de vista de los negociadores de las Partes, estos párrafos constituyen una parte bastante pequeña de su trabajo.
Por la mañana el grupo sindical oyó un informe del Embajador de Brasil, José Antonio Marcondes de Carvalho (Brasil juega un papel importante en la redacción del texto). Nos informó que aunque tenemos cierto apoyo, son pocos los países que están dispuestos a considerar este asunto como un tema de crucial importancia. Por lo tanto, están ganando los que están fuertemente a favor de trasladar, debilitar, dividir, o incluso eliminar el párrafo en cuestión. Parece que la Transición Justa en si no es el principal punto de la objeción; el párrafo también contiene referencias a los derechos humanos en general, y específicamente a los derechos de las mujeres y de los pueblos indígenas. Los países que objetan están preocupados de que esto pueda establecer responsabilidades legales y por lo tanto gastos si se adopta tal como está.
Por supuesto, si los negociadores que se oponen a nuestro punto de vista creen que podría haber disturbios a consecuencia de que las personas reclamen sus derechos a medida que hagamos la transición hacia una economía más sostenible, deberían considerar la ira y caos que enfrentarán los países si los ciudadanos desempleados y que han sido despojados de sus bienes se enteran de que sus líderes firmaron un acuerdo climático que no les da ningún derecho. Lo fundamental es que un acuerdo climático es una cuestión de humanidad. Debe tener un rostro humano. No debe quedar nadie atrás.
El día viernes, al terminar el trabajo, nuestro texto todavía sobrevive, aunque continúa en peligro.
En otras noticias, tal como se esperaba, la cuestión de la financiación climática es un área de desacuerdos sin resolver. ¡Sin embargo, se dice que los subsidios colectivos para la producción de combustibles fósiles a nivel mundial son aproximadamente 40 veces mayores que los compromisos actuales para el Fondo Climático! 11 países europeos han resucitado la idea de un impuesto sobre las transacciones financieras.
Por otra parte, hay algunos avances en una serie de cuestiones. La pregunta es si ese progreso es suficiente para asegurar que se pueda concluir un acuerdo al final de la segunda semana. Ha aumentado un sentido de ansiedad por la posibilidad de que los diversos grupos de trabajo no vayan a completar su trabajo a tiempo. Una gran cantidad de texto permanece entre corchetes, lo que significa que los Ministros tendrán un montón de decisiones que tomar la próxima semana.
Día 5 – Jueves 3 de diciembre
Ha seguido la batalla sobre dónde colocar las referencias a la “Transición Justa”. Lamentablemente, la mayor parte de las discusiones se ha dado a puerta cerrada. Los fragmentos de información que tenemos no son alentadores.
¿Cuál es el motivo real de esta controversia? La razón que se ha dado para trasladar o eliminar las referencias señaladas es con el fin de acortar y simplificar el texto. Es claramente absurda esta justificación, que proviene de los mismos negociadores nacionales que proveyeron al mundo un texto de 7000 páginas en TPP. El grupo sindical decidió insistir firmemente en conservar el texto tal como está, y en los mismos párrafos originales.
En cuanto a otras materias, el estado de ánimo de optimismo generalizado ha dado paso a la ansiedad porque el progreso hasta la fecha es demasiado lento, y no permitirá elaborar un texto final en el tiempo disponible.
El Foro Sindical comenzó hoy con el evento conjunto de IndustriALL y la CSI, que fue muy bien recibido por la sala llena.
Respecto a lo que queda para hoy y mañana, asistiré a otros eventos sindicales en el área de Generaciones Climáticas.
Se puede ver aquí la presentación de Brian en el Foro Sindical.
Día 4 – Miércoles 2 de diciembre
Esta mañana se notó la gran frustración que existía en nuestro grupo sindical, que todavía trata de entender la razón que se tuvo para que de repente se comenzara un ataque a las referencias a la Transición Justa en los Artículos 2 y 2bis del Acuerdo. Este texto no debería haber llamado mucho la atención en esta etapa. Se decidió que todos los delegados sindicales presionen al máximo a los negociadores para que se conserve el texto tal como está, y en el mismo lugar. No se puede transigir: después de todo, se trata de una de las tres reivindicaciones principales del movimiento sindical en la COP21.
Durante todo el día, los subcomités siguieron trabajando sobre las partes correspondientes del texto, principalmente en sesiones donde no se permitió que asistieran observadores, sin embargo por la tarde todavía no había resolución. Mañana por la mañana, el negociador brasileño piensa hacer un resumen de las conversaciones de hoy, y se reanudará el diálogo.
Entre los países involucrados están los EE.UU., la UE, Australia, Canadá, Noruega, Turquía y Nueva Zelanda y posiblemente otros, aunque corre el rumor de que la oposición a los párrafos en cuestión ha tenido su origen en la delegación de los EE.UU., cuyos abogados gubernamentales temen que el lenguaje señalado pueda crear obligaciones o responsabilidades legales. Intentan eliminar el texto sobre Transición Justa de la parte operativa del acuerdo (es decir, las referencias a los derechos humanos, trabajadores, género, etc.) y también (no por casualidad) la mención de responsabilidad común pero diferenciada. Pueden o no estar de acuerdo en dejarlo en el preámbulo.
Se dice que varios otros países han hecho declaraciones a favor de dejar nuestro texto como está, pero no necesariamente van a estar dispuestos a invertir mucho capital político en hacerlo cumplir, ya que hay cientos de otras cuestiones que se están negociando y se dice que la Presidencia francesa está empezando a indicar que está impaciente respecto al progreso general de las negociaciones de la COP.
Es probable que esta pelea continúe durante los días próximos. Mientras tanto, tengo que preparar para el evento sindical conjunto de IndustriALL y de la CSI que se realiza mañana, que inicia toda la serie de eventos sindicales.
Día 3 – Martes 1o de diciembre
Se ha podido saber hoy que, en sesiones cerradas que se realizaron anoche, se propuso eliminar los párrafos que hacen referencia a la Transición Justa en la parte operativa (Artículos 2 y 2bis) del proyecto de Acuerdo de París. A pesar de que en el proyecto de acuerdo existen otras referencias a la Transición Justa, los párrafos que se propone eliminar son los más fuertes, ya que establecen el vínculo imprescindible entre la Transición Justa y el propósito mismo del Acuerdo. Peor aún, la propuesta parece haber sido hecha por Noruega (!) en aras de "simplificación" del acuerdo. En el grupo sindical, acordamos redoblar nuestros esfuerzos con la intención de conversar con los negociadores para dejarles en claro que es muy mala idea abandonar las mencionadas referencias a la Transición Justa. No está claro en este momento si nuestro texto se ha incluido o se ha eliminado de los Artículos 2 y 2bis.
En otros asuntos, para personas que no sean delegados que representan a determinado país (una "Parte" en la nomenclatura de la CMNUCC), hay relativamente pocas oportunidades para poder hablar ante una de las principales sesiones plenarias. Por lo tanto, tuve mucha suerte al tener la oportunidad de dirigirme a la sesión plenaria de apertura del Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico y Tecnológico, uno de los principales grupos de trabajo de la COP.
He aquí lo que dije:
Declaración de la TUNGO
Gracias, Señor Presidente
Mi nombre es Brian Kohler y trabajo para IndustriALL Global Union, una familia mundial de sindicatos industriales, y específicamente aquí represento al movimiento sindical internacional.Señor Presidente, los sindicatos valoran el trabajo que ha realizado el OSACT hasta la fecha en el Foro sobre medidas de respuesta respecto a la evaluación de los vínculos entre las políticas climáticas y el empleo. Estamos convencidos de que la clave para aumentar el apoyo social para este proceso es demostrar que se pueden tomar medidas para garantizar que la acción climática y el progreso social vayan tomados de la mano.
En los años anteriores, los sindicatos entregaron nuestro compromiso de procurar que otros organismos de la ONU avancen respecto a este tema, estableciendo directrices para orientación de la CMNUCC. Nos complace mucho poder informar al Presidente que, hace apenas dos semanas, la Organización Internacional del Trabajo ha adoptado por unanimidad las primeras Directrices para una Transición Justa, estableciendo por primera vez una concisa lista acordada de las políticas que se deben seguir si los gobiernos y los empleadores quisieran proteger a los trabajadores y a las comunidades en la transición hacia una economía que proteja el clima.
Ya ha llegado el momento para que OSACT establezca definitivamente el diálogo en ese proceso y que, como órgano de asesoramiento científico y tecnológico, asegure que en los debates de la CMNUCC se tomen en cuenta la información correspondiente y las mejores prácticas.
Desde luego, la labor de OSACT irá tomando forma según los resultados del Acuerdo de París; esperamos que dicho acuerdo incorpore referencias robustas a la necesidad de una Transición Justa para los trabajadores. Por tanto, suponemos que este organismo hará un seguimiento de su labor anterior sobre la Transición Justa, y también que las Partes reafirmarán su compromiso, con un programa de trabajo más claro sobre este tema, y con el apoyo de una asociación con la OIT y fuerte participación de los sindicatos.
Señor Presidente, tenemos que cambiar el mundo tal como lo conocemos. Y eso sólo sucederá si los trabajadores son apoyados, tienen información, y reciben capacitación para hacerlo. El movimiento sindical está dispuesto a ofrecer sus ideas, sugerencias y soluciones para que esto sea posible.
Gracias.
Día 2 – Lunes 30 de noviembre
Sin precedentes fue la decisión del Presidente Hollande de Francia y de Laurent Fabius, Presidente entrante de la COP, quienes invitaron a los jefes de Estado para dirigirse a la COP en el primer día de las sesiones. (En las COP anteriores, los jefes de Estado no solían asistir hasta la segunda semana.) Hoy dieron breves discursos unos 150 reyes, reinas, presidentes y primeros ministros. La intención del Presidente de Francia fue elevar el nivel de compromiso político al comienzo de las negociaciones, en lugar de esperar hasta el final de la conferencia cuando quedaría poco tiempo, y habría muchos factores cruciales en juego.
Muchos de los líderes del mundo aprovecharon la oportunidad para hablar de la necesidad urgente de tomar medidas respecto al clima. Ban Ki-Moon recordó a los líderes reunidos que el futuro estaba en sus manos. El Presidente Obama de EE.UU. pidió se acordara rescatar a los pueblos de la pobreza sin condenar las futuras generaciones a vivir en un planeta imposible de reparar. El Presidente de la China, Xi Jinping, dijo que la COP no es una meta, sino un punto de partida. Los líderes de los países en vías de desarrollo recordaron a la conferencia que necesitan ayuda para alcanzar a tener la capacidad para actuar, por ejemplo Costa de Marfil habló de financiación para el clima y para la transferencia de tecnología. Varios líderes se refirieron a los Objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible aprobados por las Naciones Unidas en septiembre. Los pequeños estados insulares, algunos ya en peligro de inundación por la elevación del nivel del mar, hablaron emocionados de la urgencia de su situación, tal como dijo Tuvalu: si salvamos a Tuvalu, salvamos al mundo. El nuevo primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, declaró que la lucha contra el cambio climático no eliminará puestos de trabajo, sino más bien los creará. Trudeau concluyó diciendo "Otra vez Canadá está presente".
Esta noche continúan las negociaciones sobre dos párrafos clave que contienen referencias a la Transición Justa. Se ha prohibido que asistan observadores sindicales a esta reunión, lo cual no es buena señal. Mañana se podrá ver con mayor claridad cuán difícil será conservar estas referencias en el texto final.
Día 1 – Domingo 29 de noviembre
Hoy se inauguró oficialmente la XX1ª Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, también conocida como la COP21.
En ciudades de todo el mundo se realizaron marchas por el clima para poner de relieve la importancia de estas conversaciones. Sin embargo, estas manifestaciones no fueron bien vistas en París. A raíz de los ataques terroristas del 13 de noviembre en París, se intensificó la seguridad en el país, prohibiéndose todas las protestas y manifestaciones. ¡Sin embargo, el gobierno francés decidió no suspender los partidos de fútbol ni los mercados de Navidad! No obstante esto, se llevaron a cabo dos eventos, a consecuencia de lo cual varios manifestantes fueron detenidos. Un aspecto extraño de todo esto fue que el proceso de seguridad para obtener credenciales como delegado y para entrar al lugar de la reunión de la COP no parecía muy diferente de otros años.
Ésta es la XXIa reunión de la COP, lo que quiere decir 21 años de fracaso. Yo mismo he participado en la lucha por acción sobre el cambio climático por más tiempo que muchos de los jóvenes delegados llevan en esta tierra, pero sin que yo pueda demostrar avances significativos al respecto. Ahora no se puede demorar más. Sin embargo, estoy extrañamente optimista sobre la COP21, por varios motivos:
En primer lugar, ahora se presentan nuevas evidencias científicas más claras y más alarmantes que nunca.
Segundo, ha cambiado la opinión pública a nivel mundial: en todos los países hay ahora una mayoría que apoya la idea de que se alcance un acuerdo en París.
Tercero, los Objetivos de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, que fueron adoptados en septiembre por la Asamblea General de la ONU, contienen referencias específicas a acción sobre el clima y otros objetivos respecto a la sostenibilidad. Por lo tanto, si fracasaran las negociaciones en París, en cierto modo se presentaría una contradicción ante los compromisos que ya fueron acordados por los líderes del mundo. También hay otros indicios positivos, que no voy a enumerar aquí, que han señalado los líderes políticos y otros.
Mi tarea, y la de otros sindicalistas presentes en esta cumbre, es tratar de lograr los tres objetivos fundamentales del movimiento sindical, éstos son: (1) aspirar a metas superiores, aprovechando todo el potencial de creación de empleo que conlleva la acción por el clima; (2) cumplir con el financiamiento climático y el apoyo para los más vulnerables; y (3) comprometerse a procurar una Transición Justa para los trabajadores y sus comunidades.
Entonces, en momentos en que comienza la COP21, me aferro a un sentido de optimismo prudente. Después de dos semanas voy a saber si tenía razón o estaba equivocado.