24 junio, 2016Diecisiete trabajadores de la mina de oro Agh Dareh en Irán fueron azotados públicamente en mayo, mientras un prominente activista sindical encarcelado comenzaba una huelga de hambre.
En efecto, los mencionados trabajadores de la mina de oro en la ciudad noroccidental de Tikaab fueron azotados por haber protestado contra el despido de 350 colegas. Cada uno recibió entre 30 y 99 latigazos. Su empleador presentó una denuncia contra ellos por la protesta que habían realizado; la sentencia fue aplicada por los servicios de seguridad.
Otros nueve trabajadores de la mina de hierro Bafgh fueron condenados a recibir azotes por haber participado en protestas en 2014.
La flagelación que se aplicó es parte de la intensificación de la represión contra activistas sindicales. Debido a la represión contra los sindicatos independientes, IndustriALL no tiene afiliados en el país, pero está apoyando el surgimiento de sindicatos libres.
En noviembre del año pasado, Jafar Azimzadeh, soldador y dirigente del Sindicato Libre de Trabajadores de Irán, fue condenado a seis años de cárcel por sus actividades sindicales después de organizar una petición firmada por 40.000 trabajadores. Fue acusado de "poner en peligro la seguridad nacional".
El Sr. Azimzadeh fue elegido como representante de los trabajadores ante la 105a Conferencia Internacional del Trabajo (CIT) realizada en Ginebra en junio de 2016, pero no pudo asistir debido a su encarcelamiento, aunque se permitió que asistieran representantes de los sindicatos controlados por el Estado.
Inició una huelga de hambre el 29 de abril de 2016 como protesta por la represión contra los trabajadores iraníes. Hay grave preocupación por su estado de salud.
También se encuentran encarcelados varios otros militantes, entre ellos Reza Shahab, dirigente de VAHED, el sindicato de conductores de autobuses de Teherán, y otros han sido convocados al Tribunal Revolucionario, que se utiliza para tratar casos de sedición.
Después de las negociaciones sobre su programa nuclear, Irán firmó el Plan Conjunto de Acción Integral, también conocido como el acuerdo nuclear. A consecuencia de esto, se levantaron las sanciones contra el país, produciéndose una afluencia de capital extranjero a Irán. El proceso ha desestabilizado el país, y recientemente se declaró en quiebra la histórica empresa fabricante de productos electrodomésticos Arj, con la pérdida de muchos puestos de trabajo.
Después de que representantes del Fondo Monetario Internacional visitaran al país recientemente, los sindicatos iraníes creen que se ha intensificado la represión con el fin de crear una fuerza de trabajo más dócil para los inversores extranjeros.
En un comunicado publicado por el Sindicato de Trabajadores Metalúrgicos y Mecánicos de Irán durante la CIT, el sindicato señaló lo siguiente:
“Los latigazos del Fondo Monetario Internacional están golpeando las espaldas de los trabajadores y de nuestra industria manufacturera”.
Por su parte, Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL, comentó al respecto:
“IndustriALL Global Union deplora enérgicamente la brutal flagelación de 17 trabajadores de la mina de oro Agh Dareh en mayo de 2016. Los mineros estaban ejerciendo su legítimo derecho a protestar contra los despidos, exigiendo seguridad en el empleo.
“En los últimos días, otros nueve trabajadores de la Bafgh Mining Company en la provincia de Yazd también han sido condenados a prisión y decenas de latigazos. Estas inhumanas sentencias contra trabajadores que ejercen su derecho de protestar son una violación grave de los derechos humanos reconocidos internacionalmente y de los convenios de derechos laborales.
“Por lo tanto, es imprescindible que el Gobierno de Irán intervenga inmediatamente para poner fin a violaciones graves de los derechos humanos y sindicales, incluyendo la flagelación de mineros, en la mina de oro Agh Dareh, y en la Bafgh Mining Company.
“Aprovechamos esta oportunidad para instar una vez más al Gobierno de Irán a ratificar el Convenio 87 de la OIT sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación, y el Convenio 98 de la OIT sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva”.