13 enero, 2014IndustriALL Global Union y la Confederación Sindical Internacional (CSI) han exigido al gobierno de Camboya tomar medidas de inmediato para investigar el asesinato de cuatro trabajadores de la confección durante las huelgas del 3 de enero; piden también la libertad de los 23 sindicalistas que se hallan detenidos. Igualmente pidieron al gobierno que establezca un salario mínimo que permita a los trabajadores y sus familias por lo menos cubrir sus necesidades básicas.
Del 10 al 13 de enero, una delegación sindical internacional conjunta de IndustriALL y de la CSI viajó a Camboya con la misión de exigir la libertad de los sindicalistas encarcelados, pidiendo el inicio de una investigación para aclarar los homicidios; también se exigió aumentar el sueldo mínimo. Esta misión internacional de trabajadores manifestó especial preocupación por la suerte del presidente sindical Vorn Pao, quien fuera severamente golpeado y quien todavía permanece en la cárcel a pesar de su mal estado físico.
La misión exigió se realice una investigación auténtica, sólida e independiente en torno a los asesinatos, y castigo para los responsables. Esta exigencia fue presentada hoy al Ministro del Trabajo de Camboya.
Además, la delegación informó al Ministro que era insuficiente el plan oficial de iniciar una investigación controlada por el gobierno, ya que se contaba con antecedentes que en el pasado comités gubernamentales de esta naturaleza no produjeron resultados concretos.
La delegación también reafirmó al Ministro la solicitud de medidas urgentes para aumentar el salario mínimo, exigiendo al gobierno se comprometa a respetar plenamente el Convenio 87 de la OIT sobre libertad de sindicación, que fuera ratificado por Camboya. Se calificó de inadecuada una propuesta del gobierno de crear una nueva Comisión sobre salarios, encabezada por el Ministro de Finanzas. Hasta la fecha, no se ha programado ninguna reunión de dicha Comisión, y es probable que una mayor demora para establecer un salario mínimo decente dé lugar a más protestas laborales de los trabajadores en su lucha por lograr justicia en materia salarial.
La delegación también denunció las amenazas que se habían presentado por parte de la Asociación de Fabricantes de Prendas de Vestir de Camboya (GMAC) de emprender acción legal para, en efecto, dejar a los sindicatos en bancarrota.
La delegación sindical conjunta presentó una declaración en la que se dice que la industria textil de Camboya, con un volumen anual de ventas de US$5,1 billones, puede darse el lujo de pagar más que el salario mínimo mensual de US$100, señalando que la investigación que ha realizado IndustriALL indica que se necesita un sueldo mínimo de US$260 para cubrir los gastos básicos de una familia de cuatro personas.
Jyrki Raina, Secretario General de IndustriALL, ha dicho que es hora de que se ponga fin a la violencia:
Los trabajadores del sector textil en Camboya necesitan un ambiente de trabajo seguro, libre de amenazas y violencia. Por su trabajo deben recibir un salario digno que refleje el verdadero costo de la vida.